Mesa de debate Educación Artística formal y no formal
Derechos culturales: Zapata después de Zapata
La observación de la política cultural y su ejercicio pareciera estar centrada en una serie de leyes y normativas que enmarcan la toma de decisiones. Sin embargo, la última semana la reflexión ha girado en torno a temas que no necesariamente se encuadran del todo en un instrumento jurídico.
En el Museo del Palacio de Bellas Artes se expone la muestra Zapata después de Zapata, la cual, según la cartelera del espacio expositivo, se abrió al público el 27 de noviembre de 2019 y permanecerá hasta el 16 de febrero de 2020. La polémica, las marchas y las notas de diversas figuras tanto del mundo artístico como de la población en general, a partir de la exposición de la obra “La Revolución” del artista Fabián Cháirez, muestran que aún en el siglo XXI y en un momento en el que todos suponemos cierta autonomía, apertura y libertad de expresión, en el ámbito cultural público se mantiene un modo de pensar atado a lo convencional, antidemocrático y con miedo a afrontar cambios.
Más allá de que nos preocupan las diferentes problemáticas que atañen a la población mexicana por la carencia de abordajes desde la perspectiva de género, por ejemplo la supuesta “tolerancia” que se defiende desde tradicionalismos inaceptables en una nación democrática, el Observatorio de Arte y Cultura condena la violación a los derechos culturales y de autor de artistas, curadores y profesionales del ámbito museístico.
Luego de una serie de acusaciones y manifestaciones por parte de una comunidad que se afirma afectada al tener lazos de descendencia del personaje revolucionario (construido literariamente y que responde a construcciones dicotómicas basadas en un “deber ser”) referido en un documento artístico, el Museo del Palacio de Bellas Artes, a partir de un diálogo entre la familia Zapata, la Secretaría de Cultura y el Instituto Nacional de Bellas Artes, decidió eliminar la obra del artista Fabián Cháirez de la publicidad de la exposición Zapata después de Zapata y añadir una cédula que explica el descontento de la familia y que rompe con la propuesta curatorial del Dr. Luis Vargas Santiago.
En este caso, la decisión de los funcionarios que un principio se manifestaron a favor de los temas de inclusión y de libertar de expresión, en este momento se muestran violatorios a los derechos y a la producción intelectual de artistas y profesionales de la cultura. Una vez más la producción cultural que se otorga a la población se aleja de la construcción de conocimiento y de la posibilidad de propiciar libertar de pensamiento en los públicos. El INBAL y la Secretaría de Cultura demostraron que la centralización de discurso continua y cada día aumenta más. Nos enfrentamos a la inexistencia de cuestionamientos a la “historia oficial” y por lo tanto, se retrocede en el tiempo al censurar obras que muestran otras realidades, otras latitudes y que nos piden ir más allá de la construcción de género tradicional.
A este mismo respecto, las notas periódicas no sólo han cuestionado las decisiones en torno a un movimiento de género y un proyecto expositivo, sino que de nuevo son los trabajadores de cultura los que llegan al fin de año con el ya mencionado #Yapágameinba. Podría parecer que los escándalos y las notas amarillistas sobre la obra de Cháirez de las que el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura parece huir, se utilizan también como pretexto para opacar que no sólo se menosprecia y se viola la producción cultural, sino que el trabajo que lo produce no se considera propio de ser pagado y respetado.
El Observatorio de Arte y Cultura manifiesta que existe una falta a los derechos de los artistas como Fabián Cháirez, a la producción curatorial de Luis Vargas Santiago, al público que atiende a museos del INBAL, pues los discursos se mantienen sesgados y sin posibilidad de diálogo y, finalmente, a todos los profesionales que dedican sus días a investigar, curar, producir y mover exposiciones, pues su trabajo pareciera no tener la suficiente importancia. Los temas de este posicionamiento abren camino y denotan los huecos que deben ser atendidos por la administración pública, por la Comisión Nacional de Derechos Humanos y por la ciudadanía en general.
Observatorio de Arte y Cultura
*Imagen La Revolución, 2013, Fabián Chairez. Vía Instagram del autor @fabia_chairez
La cultura en tiempos electorales. ¿Una nueva visión de cultura del estado o nuevamente asistencialismo gubernamental?
México es un país con grandes necesidades de inversión en infraestructura y alicientes en cultura y educación, incluyendo temas como la difusión, la investigación y la producción artística. La nación mexicana cuenta con una historia cultural que es y ha sido estudiada y explotada desde muchas aristas, aunque siempre ha luchado por obtener más apoyo del gobierno para materializar múltiples intenciones del ámbito artístico y cultural: programas de becas y de apoyo a proyectos; fomento a diversos sectores creativos, de educación e investigación; así como la salvaguarda de las obras de arte, las zonas arqueológicas, los vestigios arqueológicos, la memoria fílmica, los recintos de exhibición, entre muchas otras. No es un secreto que en México siempre se ha manifestado un espíritu por mostrar la riqueza cultural, pero desde la mirada pública siempre se ha tomado como cultura lo que una élite estrecha piensa que esta es, o bien se ha confundido la cultura con espectáculo, convirtiéndola en “pan y circo” para el pueblo.

Hoy estamos a un día de que las casillas se abran para votar y entre todo el mar de información que lanzan los candidatos, poco tiene que ver con la cultura y el arte. Se ha visto cómo el interés hacia la cultura nunca ha sido eje electoral, ya que la visión económica en la que vivimos únicamente puede contemplarla desde el retorno de inversión, ¿qué ganan con promover a la cultura como un derecho para toda la sociedad?
La cultura tiene como relevancia no sólo el entretenimiento y la recreación, también es fundamental desde el aspecto identitario, como nación, como individuos y como comunidad. También se debe de considerar el aspecto histórico de la cultura, la que promueve el avance como sociedad. El arte y la cultura generan ingresos para una nación, especialmente en una como México. Desde el turismo, la venta internacional de arte, la creación artística, la gastronomía, en fin, desde miles de vertientes.
Históricamente las campañas electorales nunca han tenido como eje la promoción de la cultura, se nota una falta de interés y de entendimiento del ámbito cultural. Finalmente, en esta contienda electoral todas las campañas presidenciales sumaron propuestas culturales, unos antes que otros y con más o menos profundidad.
Para abordar estos temas, nos enfocaremos en las campañas presidenciales de los tres candidatos punteros: Anaya (PAN/PRD/Movimiento Ciudadano- México al Frente), López Obrador (Morena/PT/PES- Juntos haremos historia) y Meade (PRI/PANAL/Partido Verde). Los candidatos a la presidencia nombraron a representantes del ámbito cultural conforme fueron avanzando las candidaturas. Andrés Manuel López Obrador nombró a Alejandra Frausto como la futura secretaria de cultura desde el mes de diciembre de 2017; Ricardo Anaya le siguió al proponer a Raúl Padilla a principios de abril de este año y finalizando con José Antonio Meade, nombrando a César Moheno hasta mediados de mayo de 2018. En la selección de los 3 representantes culturales de cada plataforma se aprecian enfoques muy diversos sobre cómo abordar el tema de la cultura.
Alejandra Frausto coordina la plataforma cultural de Andrés Manuel López Obrador por el partido Morena. En las 3 contiendas presidenciales en las que ha participado AMLO siempre ha presentado un proyecto de nación que ha ido modificando a través de los años. En esta ocasión ha presentado un proyecto de nación acompañado de una plataforma que representa cada una de las secretarías del estado mexicano. Frausto fue elegida por Andrés Manuel no solamente para desarrollar el plan cultural de su sexenio, sino también para encabezar a la Secretaría de Cultura. Su nueva secretaria de cultura tiene experiencia en proyectos culturales en algunas comunidades del país, es ex directora de Difusión Cultural de Claustro de Sor Juana y del Instituto Guerrerense de Cultura, también es ex directora de Culturas Populares del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CONACULTA), por mencionar algunos. Ella pone como principal eje el de ‘colocar a la cultura en un lugar estratégico para la transformación del país’, lo cual tiene que ver con la reestructuración del tejido social a través del arte y la cultura.
Raúl Padilla es el coordinador de cultura nombrado por Ricardo Anaya del Partido Acción Nacional (PAN). Anaya nombró a su coordinador de cultura más de un mes después de haberse iniciado la contienda electoral, realizando propuestas culturales plasmadas en 8 ejes que van de crear una política integral que no esté limitada a las Bellas Artes, mencionando la diversidad cultural, a plantear la reestructuración de la actual y de reciente creación Secretaría de Cultura. Padilla es ex rector de la Universidad de Guadalajara y presidente fundador de la FIL de Guadalajara. Su plataforma cultural lleva como fundamento realizar ‘una propuesta de política cultural en diálogo abierto con toda la comunidad cultural’.
César Moheno fue nombrado coordinador de cultura para la campaña de José Antonio Meade del Partido Revolucionario Institucional (PRI) a mediados del mes de mayo, mes y medio después de haber iniciado oficialmente las campañas. Moheno ha sido Director del Centro Regional del INAH en Tabasco, coordinador nacional de Centros Regionales del INAH, dirigió la Biblioteca Nacional de Antropología e Historia. También fue director editorial de Editorial Clío y coordinador nacional de Difusión del INAH, entre otras labores dentro y fuera del Instituto Nacional de Antropología e Historia. Su eje cultural para esta campaña presidencial es ‘consolidar a México como una potencial cultural’.
Los tres coordinadores de cultura tuvieron encuentros y debates en los que pudimos encontrar cuáles serán las directrices culturales para el próximo sexenio. Se ha hablado de manejo de presupuesto, de la utilización de la cultura como regenerador social, de migración y fuga de talentos, digitalización, en fin, de temas variados. En todos los coordinadores se puede ver la tendencia ideológica con la que contribuyen a sus campañas, entendiendo que su experiencia marca la razón por la cual coordinan las plataformas culturales de cada candidato.
Pero entonces, ¿por qué las propuestas culturales durante las elecciones son tan escuetas? Y, ¿por qué siempre son dejadas para el final de las contiendas? Pues esto tiene que ver, en parte, con las visiones políticas y economicistas que adoptan los gobiernos. La política neoliberal lleva más de 30 años de estar activa en el país, en esta la incidencia del arte y de la cultura únicamente está relacionada con el entretenimiento y el ocio. Pero el ámbito cultural ha luchado en contra de estas visiones buscando la democratización de la cultura en nuestro país. Esta lucha se ve en cada sexenio, con cada distribución de presupuesto. El último sexenio fue el más alarmante, ya que el recorte presupuestal a la cultura fue desempeñándose a lo largo del mandato del Presidente Enrique Peña. De acuerdo a Enrique Méndez, en el primer año el presupuesto de cultura inició con un recorte del 25% en relación al último año del mandato de Felipe Calderón. Esos recortes continuaron a lo largo del sexenio.[1] El recorte a la inversión de cultura ha tenido un impacto grande y es por eso que es fundamental su discusión para los próximos años.
La crisis presupuestal a la cual se ven atenidas las principales instituciones culturales de México es evidente. Tanto INAH, como INBA y FONCA están constantemente buscando solución para sus problemas de presupuesto. Los ingresos que generan estas instituciones a través de sus recintos y publicaciones son recaudados por el Servicio de Administración Tributaria (SAT), lo cual deja sin autonomía económica a los directores y administradores de estas instituciones. Es decir, todos los sueldos, todos los gastos de reparación de bienes, toda inversión en nuevas exposiciones están supeditadas a la bondad del gobierno federal al repartir la partida presupuestal. ¿Qué ha generado esto? Problemas desde no poder pagar sueldos por meses, no poder hacer reparaciones en los recintos, contar con poco personal y a tener salarios mal pagados, además de tener miles de empleados sin prestaciones de ley.
Estos problemas van escalando. En el Instituto Nacional de Bellas Artes se tiene la actual crisis con el caso del #YaPágameINBA. Esta crisis lleva varios años en la institución, los trabajadores pasan meses sin poder cobrar su salario, lo cual es resultado de un clasificador llamado Capítulo 3000 que cubre gastos de adquisiciones, rentas y salarios de servicios otorgados por terceros, es decir los trabajadores que no son de base. Lo que se exige es la regularización de los salarios de los contratos bajo este régimen, ya que pueden pasar de 3 a 6 meses sin recibir ingresos. Además de no contar con prestaciones de ley, por ser outsourcing.
En el Instituto Nacional de Antropología e Historia también hay problemas presupuestales grandes, desde no tener dinero para la recuperación del patrimonio dañado por los desastres naturales hasta no poder recuperar recintos con problemas de inundaciones o derrumbe que ponen en riesgo a la gente y a las colecciones. Caso con el que también el INBA tiene que lidiar, teniendo espacios museísticos en pésimas condiciones que ponen en riesgo a las piezas de arte ahí resguardadas. Igualmente, el FONCA tuvo un recorte considerable en becas y apoyos. Esto demuestra un abandono del ámbito artístico y cultural, ya que las posibilidades de optar por un apoyo del estado se vuelve cada vez más complejo. Esto afecta a la educación, difusión, investigación y producción de arte y de cultura.
El problema presupuestal es solamente uno de los múltiples temas que los candidatos deberían de considerar ya que existe otra visión importante para su interés. En el tema de los recursos humanos en INAH e INBA Moheno propuso reencausar y rearmar un equilibrio y otorgar condiciones dignas para los trabajadores contratados bajo el Capítulo 3000. Recordemos que César Moheno representa al anterior secretario de desarrollo social y antes secretario de hacienda, ¿no sería indispensable preguntarle si esto no es producto de una reforma laboral aprobada por el gabinete del cual Meade fue parte? Ya que este tipo de contrataciones son permitidas gracias a esa reforma que deslinda la responsabilidad de otorgar condiciones dignas a los trabajadores.
Y sobre el incremento a la partida presupuestal para cultura, todos hacen mención sobre eso pero contradiciéndose en los porcentajes y cifras, manejándose estas de manera tendenciosa. Frausto propone un piso de 3.3% de PIB a cultura, aunque César Moheno dice que actualmente ya se le destina el 3.8% y Padilla comentó que es el 1% del presupuesto del gobierno federal. Padilla propone una reforma fiscal y el fomento de una cultura filantrópica, lo que quiere decir, hacer más atractivos los incentivos a los particulares que quieran hacer donativos al arte. Mencionó que en otros países se otorga un 50% de deducción de impuestos a quienes donen a la cultura, siendo esta una tónica clara en sus propuestas, siempre viendo hacia afuera. Frausto propone que se le debe de dar un sentido económico a la cultura, aunque no se entiende muy bien cómo.
Algo que se ha visto en estas nuevas propuestas, especialmente las del PRI y las del PAN tienen que ver con la creación de industrias creativas. Es decir, responsabilizar al creador de sus propios ingresos. En estas visiones se nota un desentendimiento de todas las áreas en las cuales el arte y la cultura se mueven. Parece ser que se propone que el artista se haga difusión, cure su propia obra, consiga su propio dinero, se investigue y se critique a sí mismo. Hay que diferenciar las labores a través de las cuales el gremio cultural trabaja, parece que no se entiende que hay gestores, críticos, creadores, investigadores, entre muchas otras variables de la labor cultural. Englobar las labores habla de una falta de comprensión de la profundidad del gremio.
Y esta comprensión permite el entendimiento de otra de las visiones a través de la cuales se deben de considerar a la cultura como parte fundamental de una elección. Los artistas, curadores, historiadores, gestores, directores de museos, todos los actores del medio artístico y cultural tienen como importancia social la de ser generadores y líderes de opinión. Lo que pasa en una sociedad y en un gobierno se proyecta a través de la cultura. La crítica es parte fundamental de esta. ¿Cómo es que va a aceptar la crítica el próximo gobierno?
Se ha atentado contra la libertad de expresión y se otorga poco apoyo o ninguno a las formas artísticas más contestatarias. Parece que la actualización de las visiones sobre la cultura está más relacionada con propuestas que la digitalizan (PRI y PAN) o se capacita a las instituciones para su actualización (Morena). Tomar en consideración las necesidades de expresión por parte de los productores es fundamental, plantearse la necesidad del gobierno de ver y de escuchar. La crítica está ahí, ¿pero ellos serán capaces de abrirse a ella? Así debe de entrar en la discusión la libertad de expresión en las calles y en los textos. El arte público, el arte contestatario, la crítica política. Y sobre esto mismo, la agenda de diversidad cultural y de género son meramente mencionadas en algunas conversaciones. Se da de facto que se incluyen en una agenda.
Es por eso que hay que revisar las visiones a través de las cuales se plantean las propuestas y la viabilidad de las mismas. Las visiones culturales se siguen abordando eurocéntricamente, se nota poca capacidad de ubicarse como un ente único y plantearse desde uno mismo y para uno mismo. Esto quiere decir, que analizarse a partir de visiones eurocentristas no soluciona nada aquí, ya se ha visto cómo la cultura mexicana se ha comparado con otras, se trata de analizar de la misma manera y pues esto no es posible. México tiene necesidades y formas de desarrollarse muy locales, que deben de ser abordadas desde su propio contexto.
Un ejemplo de esto es el tema del cine que ha sido central en las discusiones. Existe producción cinematográfica somera pero sin oportunidades de proyección. Se habla constantemente de que el cine hollywoodense opaca de sobremanera al cine nacional, evitando su proyección en salas de todo el país. Hay desigualdad en el gremio, las becas y los programas no son suficientes, hay inequidad de género, en fin, es un tema que se debe de abordar con mucho cuidado. Porque al ver a dos de los coordinadores de campaña (Moheno y Padilla) debatiendo sobre si EFICINE y EFIARTES son suficientes y bien encaminados, no da ninguna esperanza sobre la comprensión de estos fondos y la solución a los amplios problemas con los que cuenta el cine mexicano.
Las propuestas están llenas de buenas intenciones, pero su viabilidad recae también en otras secretarías que estarán involucradas con esto, como el SAT, la SEP, Secretaría de Desarrollo Social, Secretaría de Relaciones Exteriores, en los cuales parece que Frausto tiene un acierto al considerarlas en todas las propuestas y en el plan que se ha ido desarrollando. Pero cuando nos frenamos en el proyecto “Los pinos para todos” presentado por la campaña de Andrés Manuel López Obrador es inevitable pensar en dos cosas, por un lado, ¿no es un gasto exorbitante e innecesario? Y por otro, ¿este proyecto cómo entra en la descentralización de la cultura? Porque si se establece que la nueva sede cultural, en caso de ganar las elecciones, será el estado de Tlaxcala, ¿qué resultado trae la creación de un centro monumental como el museo de los Pinos a un nuevo régimen? Esto parece ser más bien el proyecto monumental con el cual se plasmará su sexenio, aunque el gremio cultural no logre entender su pertinencia ni la necesidad de tal gasto, como pasó con “la suavicrema” o “estela de luz” de Felipe Calderón o la Biblioteca Vasconcelos de Vicente Fox. Creo que cualquiera preferiría que esos recursos se utilizaran en becas y programas de fomento a la cultura.
En estas discordancias económicas también se suman las de Padilla y Anaya. Vemos que proponen resolver el rezago presupuestal con un incremento del triple del presupuesto actual, generar una cultura filantrópica en la que los donativos reciban mayores retribuciones, otorgar seguridad social a los creadores, incrementar los fondos tanto de EFICINE como EFIARTES, pero al analizar toda la plataforma de su candidato es inevitable preguntarse, ¿y de dónde sacarán todo ese dinero?
Dentro de todas estas visiones (más que propuestas) para mejorar la cultura de México en los próximos 6 años, hay planteamientos muy positivos para el sector cultural. En estas elecciones se ha propuesto, finalmente, involucrar al gremio en la toma de decisiones. El ámbito artístico y cultural, en cualquier país, son líderes de opinión de una nación. El artista, el curador, el investigador, el historiador siempre han sido actores fundamentales en la implementación de las tendencias políticas y económicas de un país. Son los que observan y abordan estos temas, teniendo incidencia en la sociedad. Tener una “buena relación” con el sector cultural puede ser muy benéfico para los gobiernos. Las formas de arte siempre han respondido a la situación en la cual se encuentra el creador, pero hoy en día el arte es cada vez más político y por lo tanto, más incómodo para los gobiernos. Es una forma de crítica abierta accesible para el pueblo.
En las plataformas culturales se abordan algunos de los muchos problemas por solucionar. Alejandra Frausto tiene como eje la inclusión de los actores artísticos y culturales, así como las comunidades mismas buscando también la reinserción social de personas en situación de violencia. César Moheno busca la digitalización de la cultura y regresar la educación artística a la educación básica y media, al igual que Raúl Padilla. Y Padilla también propone incrementar los presupuestos y dar autonomía a los centros culturales de todo el país. Todos hablan de dar transparencia y de otorgar derechos laborales a los trabajadores. El problema de todo esto es que no se presenta cómo se desarrollarán todas sus propuestas.
Estas elecciones y la visualización de la cultura en las mismas nos dejan con preguntas como: ¿en qué momento construiremos una concepción cultural desde México y no desde el extranjero? ¿Cómo lograremos que el arte sea autosustentable sin que se someta a las dádivas del gobierno y el estado? ¿Qué plan de acción habrá para el patrimonio y los desastres naturales? ¿Qué pasará con los pueblos mágicos? ¿Van a apoyar al arte público? ¿Qué sucederá con el cine? ¿Seguirá dominando el mercado hollywoodense? Y la pregunta más importante, ¿son promesas o serán hechos?
Fuentes
“AMLO: Sitio oficial de Andrés Manuel López Obrador”, https://lopezobrador.org.mx/ (Consultada el 4 de junio de 2018).
“Encuentro por la cultura”, Video de Youtube, 2:03:37, publicado por Yotube, 30 de mayo de 2018, https://www.youtube.com/watch?v=tS_1zOTQIWY.
“José Antonio Meade: Sitio oficial”, https://meade18.com/ (Consultada el 4 de junio de 2018).
Méndez, Enrique. “Recortes, constante en el gasto para cultura durante el sexenio en La Jornada.”, Revista Proceso, 26 de Octubre 2015. Obtenida de http://www.jornada.com.mx/2015/10/26/politica/016n1pol
“Mesa de diálogo sobre la visión del futuro de las políticas culturales en México“ con César Moheno, coordinador de cultura de la campaña de José Antonio Meade, 5 de junio de 2018.
“México 2018: Desafíos de la nación. Mesa 5 Seguridad pública y derechos humanos”, Video de Youtube, 2:09:57, publicado por Youtube, 29 de mayo de 2018, https://www.youtube.com/watch?v=neN2Y_3AHN4.
“Ricardo Anaya: México en paz”, https://www.ricardoanaya.com.mx/ (Consultada el 4 de junio de 2018).
[1] Enrique Méndez. “Recortes, constante en el gasto para cultura durante el sexenio en La Jornada.”, Revista Proceso, 26 de Octubre 2015. Obtenida de http://www.jornada.com.mx/2015/10/26/politica/016n1pol
Turistas, bailarines y pandilleros: ¿a quiénes incluyen y excluyen las políticas culturales en el municipio de Puebla?
El municipio de Puebla es conocido por su gran variedad de atractivos turísticos. Su catedral, la gastronomía, sus museos y actividades culturales atrae un gran número de turistas anualmente. Un aspecto menos conocido del municipio es que es uno de los más pobres del país. Con un total de 1 millón quinientos mil habitantes aproximadamente 730 mil viven en situación de pobreza.[1] Esto significa que a casi la mitad de la población se le dificulta acceder a la canasta básica de alimentos, bienes y servicios fundamentales.[2] Además, 110 mil personas viven en pobreza extrema; es decir, imposibilitada siquiera de poder adquirir lo suficiente para una canasta básica de alimentos.[3] Según el Informe de Pobreza en México, la ciudad de Puebla también aparece dentro de los primeros en el país en categorías de rezago educativo y carencia de seguridad social, espacios y servicios esenciales de vivienda, servicios de salud y acceso a la alimentación.
Esta información contrasta con la imagen de una ciudad rica en historia y cultura; de una metrópoli que se proyecta como un referente cultural de lo mexicano tanto nacional como internacionalmente. ¿Por qué es tan grande el contraste entre la percepción del turista y la realidad? En términos de cultura, ¿cómo se está atendiendo a ese gran sector poblacional que no tienen acceso a muchos de los eventos y actividades qué se ofrecen? En todo caso, ¿podrían las políticas culturales cambiar la situación de pobreza en que se encuentra el municipio? En este ensayo intentaré dar respuesta a estas preguntas para finalmente entender cómo operan las políticas culturales y si en efecto, podrían ser partícipes en el mejoramiento del bienestar social del municipio poblano, particularmente en los grupos más vulnerables.
No hay duda que el turismo juega un papel primordial en la economía de México. De hecho, es uno de los principales sectores aportantes al producto interno bruto nacional. La ciudad de Puebla es una de las principales beneficiadas: desde su nombramiento de Ciudad Patrimonio de la Humanidad en 1987 la afluencia turística ha ido en aumento. Para el 2012, Puebla se había posicionado como uno de los principales destinos tanto para turistas nacionales como extranjeros.[4] Gracias a este tipo de difusión, en el 2015 la derrama económica de este sector en la ciudad de Puebla logró ser una de las principales fuentes de ingresos superando los 9 mil millones de pesos.[5]
A partir de los esfuerzos por visibilizar la ciudad y atraer turismo, las acciones de las políticas culturales también se comenzaron a dirigir a este mismo objetivo. De ahí que en el 2017 el Congreso aprobara la fusión de la Secretaría de Cultura estatal con la de Turismo, cuya principal misión es la captación de turistas en la ciudad.[6] En este sentido, sus actividades han estado enfocadas a ello: por ejemplo la construcción del Museo Internacional del Barroco inaugurado en 2016, un proyecto que fue duramente criticados por su elevado costo de 7 mil 280 millones y por los turbios vínculos de las empresas participantes con políticos.[7]
A nivel municipal, el Instituto de Arte y Cultura goza de cierta autonomía: depende directamente de la Secretaría de Desarrollo Económico y se distancia de cierta forma de las imposiciones de los sectores de turismo. Aún así, en su misión está contemplada la importancia del posicionamiento de Puebla a nivel nacional e internacional en material de políticas culturales.[8] Con esto en mente, su principal objetivo es que Puebla se convierta en un referente tanto en sus estrategias culturales como en la proyección de sus resultados.
Aunque las actividades del Instituto Municipal se desprenden de los planes estatales la mayor parte de ellas se focalizan en el centro de la ciudad, como lo demuestra su programa mensual.[9] La razón de ello es similar a otras grandes ciudades del país: estas zonas están virtualmente deshabitadas pero son un punto de comercio importante. Esto significa que el flujo de gente al centro, tanto residentes como turistas, es lo suficientemente alto como para justificar la concentración de las actividades culturales.
Sin embargo, no queda claro quiénes son los que acuden a estos eventos: cuántos de ellos son turistas, cuántos son de un estrato social acomodado o cuántos de los asistentes pertenecen a un sector marginado. El desconocimiento de estos datos quizá se deba al sistema actual de marcaje de éxito, en donde los indicadores son el número de asistentes, participantes o “beneficiados” pero no se discrimina en rubros más específicos. Es por ello que es difícil entender si las políticas culturales están afectando a todos los sectores de la población o si estos esfuerzos se estancan solamente en aquellos que van de paso por el centro, que bien podrían ser en gran parte turistas. Ejemplo de ello es la Galería de Arte del Palacio Municipal, ubicada en una transitada esquina en el zócalo. En junio del 2016 se presentó la exhibición Rembrandt: el hombre, lo sagrado y lo profano, donde se presentaron 58 grabados del artista y que contó con la considerable cantidad de 54,528 asistentes.[10] ¿Quiénes fueron estos asistentes? O de manera más contundente, ¿quiénes no fueron y por qué?
El desconocimiento de estos datos se debe en gran medida a los factores mencionados: 1) la concentración de las actividades en el centro histórico por parte del municipio, 2) la prioridad de captar turistas por parte del estado y 3) la manera general de contabilizar asistentes para marcar el triunfo de una actividad. Todo ello eclipsa la verdadera falta de inclusión y deja en la oscuridad a los grupos más necesitados.
Ahora, no todo es penumbra: el Instituto de Cultura Municipal ha encausado esfuerzos a proyectos incluyentes. En 2014 se creó una subdirección de la Cultura de la No Violencia donde también contemplan el fomento a artistas con discapacidad. Su principal objetivo es:
“mitigar la violencia a través de la recuperación de espacios públicos y del empoderamiento ciudadano, atendiendo, principalmente, a grupos vulnerables; promoviendo una cultura del ocio que posibilite reencauzar las actividades de niños, jóvenes y adultos mayores en su tiempo libre a través una amplia oferta de talleres y eventos artístico-culturales.[11]
Algunas de las actividades que este programa promueve son talleres de cartonería, dibujo, coro en náhuatl y danza folklórica.[12] Aunado a ello, en conjunto con la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, se han escrito dos publicaciones sobre el tema con colaboraciones nacionales e internacionales.[13] En estos artículos se elaboran discusiones críticas en torno a la violencia: cómo pensarla y categorizarla para comprenderla dentro de un complejo contexto familiar, social o político. En los argumentos de los participantes se hace palpable una voluntad por poner este tipo de discusiones sobre la mesa, aunque solo sea a un nivel teórico. El asociar la cultura con la posibilidad de disminuir la violencia en grupos más vulnerables es, sin duda, un gran paso para encauzar a las secciones gubernamentales de cultura hacia el mejoramiento de la vida de los ciudadanos. Quizá el siguiente paso sería articular sus conclusiones en actividades más aterrizadas.
Sin embargo, los datos de violencia por región son vagos y escasos. El municipio de Puebla se divide en 17 juntas auxiliares. En otras palabras, 17 secciones delegacionales además de la zona centro. Los grupos más vulnerables de la región se encuentran en algunas de estas regiones como por ejemplo San Miguel Canoa al noreste del municipio con una taza de analfabetismo del 21.7% para habitantes de 15 años o más y un 5.6% de inasistencia a la escuela en niños entre 6 y 14 años.[14] Salvo datos sobre educación, los índices específicos de violencia y discriminación de cada una de estas juntas son difíciles de obtener.[15] Aún así, creo que son datos al que todo gobierno debe tener acceso a través de las distintas dependencias.
Fuera de la subdirección de la Cultura a la No Violencia, el Instituto se enfoca en una serie de acciones que tienen como finalidad “difundir la cultura, el turismo y las artes como promoción transformadora de la ciudadanía para el desarrollo, bienestar y convivencia cívica.”[16] Entre las orientadas a la ciudadanía, las más relevantes son los ejes B T E C: es decir, Ballet, Teatro, Escritura y Circo. Se trata de escuelas en estas áreas cuya misión es propulsar a poblanos talentosos a formarse como artistas de “alto calibre y reconocimiento”[17] para que “enriquezcan la propuesta cultural de Puebla”[18], como mencionan en su página de internet. Para ingresar a estos talleres –por lo menos al de ballet y teatro- se hacen audiciones tanto en las instalaciones del centro como en otros barrios para niños y niñas entre 4 y 12 años; los seleccionados reciben una beca y algunos alumnos incluso llegaron a viajar a Nueva York a tomar cursos.[19]
Aunque es indudable el esfuerzo de integrar en las artes clásicas a poblanos que tengan esta inquietud, aún queda la pregunta de cómo se atienda al vasto sector de la población cuyos intereses distan de los ejes propuestos por el ayuntamiento y que no necesariamente transitan por el centro histórico, donde se concentran las propuestas culturales. En general, el Instituto de Arte y Cultura municipal busca tener presencia en las 17 juntas auxiliares, sin que las actividades en cada una de ellas estén necesariamente diseñadas a las necesidades específicas de cada región.[20] Además de las audiciones para las escuelas, la oferta cultural en las juntas auxiliares incluye ciclos de cine mensuales, con películas como La princesa Mononoke (1997) y series como Minúsculo: la vida privada de los insectos (2006), además de talleres de arte y lectura.[21] Este tipo de ofertas son una opción de entretenimiento, tal vez una buena manera de pasar el tiempo, pero no soluciona las problemáticas de exclusión, discriminación y violencia desde su núcleo.
La razón de esta discrepancia entre las necesidades sociales y las actividades culturales propuestas puede deberse a varios factores. El primero es un distanciamiento entre los distintos sectores municipales, en este caso entre Desarrollo Social y el Instituto de Cultura. Desarrollo Social debe contar con datos específicos de pobreza y marginalización, aunque no están expuestos en su página; pero cultura no los utiliza para el diseño de sus actividades.[22] Esto ocasiona un desconocimiento del perfil poblacional de cada sector y una relativa generalización en las propuestas culturales. Por otro lado, las actividades ofertadas están básicamente orientadas en generar una distracción o una gestión superficial del tiempo libre para desviar la posibilidad de involucrarse en actividades ilícitas, la base para el programa de Cultura de la No Violencia; pero, como mencioné, no se focalizan en una compresión cabal de las problemáticas.
Más allá de ofrecer opciones de entretenimiento, ¿cómo podría la cultura afectar positivamente la vida de los habitantes de Puebla que no tienen acceso a las propuestas municipales actuales? En primer lugar, se debe reconocer el potencial de las políticas culturales para proveer rutas de salida a la situación de marginalización.[23] Además, es esencial identificar las problemáticas específicas de exclusión, discriminación o marginalización de cada región con la finalidad de diseñar políticas culturales que atiendan cada una de estas áreas. En este sentido, más allá de ofrecer distractores, como las funciones de cine en las zonas marginales, las políticas culturales deberían movilizarse hacia el mejoramiento de la vida humana desde las bases.
Por otro lado, es importante mencionar que las políticas culturales no deberían partir de ideologías gubernamentales impuestas sino del diálogo con las manifestaciones culturales ya existentes dentro de cada sector. En este sentido, quizá el ballet y teatro no sería la mejor estrategia para grupos de jóvenes vulnerables; aunque tal vez sí lo sean para niños y niños de educación primaria y adultos que gusten de asistir a las funciones.
Un ejemplo revelador -en cuanto a grupos excluidos de las políticas culturales- es el fenómeno de las pandillas. El municipio de Puebla está dentro de los 80 más peligrosos en el país y se destaca en el número de robos con violencia, ubicándose en el lugar 26.[24] Muchos de estos robos sin duda son realizados por estas agrupaciones juveniles que abundan principalmente en juntas auxiliares como Baltazar Campeche, al sur de la zona centro.[25] La decisión de un joven de integrarse en una pandilla es el resultado de un conjunto de factores sociales y económicos: ante un rechazo familiar y una situación violenta en el seno familiar, los y las jóvenes encuentran en estas agrupaciones la confianza, afecto y amistad que carecen en casa.[26] La situación se convierte entonces en un ciclo vicioso donde la ausencia de oportunidades conlleva a actividades ilegales y la persecución policiaca.[27] Eventualmente esto se convierte en un terreno fértil para el reclutamiento del crimen organizado.[28]
El problema de las pandillas suele atacarse desde la criminalidad o las adicciones, pero ¿qué tal si se considerara dentro de su dimensión también desde un punto de vista cultural? Un estudio de pandillas en el siglo XXI, publicado en el 2012 por el Centro de Investigación y Estudios en Seguridad, insistió en que, desde esta perspectiva, las manifestaciones y expresiones culturales de los jóvenes deberían ser reconocidas para así poder ofrecer un enfoque cultural alternativo más cercano a su realidad.[29] De esta forma, se podría incidir en la transformación estructural del fenómeno a través de la creación de colectivos que podrían ser de arte urbano, música o baile.[30] Así, gracias a estas ventanas de oportunidad se podría romper el círculo vicioso de estas pandillas, canalizando los aspectos negativos hacia actividades productivas dentro de una esfera cultural.
Atender a un grupo vulnerable como el mencionado no es tarea fácil: se requiere de una gran voluntad política. Es evidente que las políticas culturales no podrán ser encaminadas a solventar necesidades comunitarias específicas sin una articulación interdepartamental entre distintas secciones gubernamentales, tomando en cuenta a trabajadores sociales que funcionen como puente entre la esfera política y la social. Esto porque es indudable que cuando las problemáticas de desigualdad y discriminación sean estudiadas y asimiladas, solo entonces se podrá elaborar un plan para modificarlas. Dos de los grandes retos para el municipio de Puebla son: cómo descentralizar la cultural hacia grupos marginados para resolver problemas sociales y cómo llevar estos planeamientos a cabo sin desatender los sectores de turismo y los grupos menos vulnerables, como los que ya se captan con los ejes de ballet, teatro y exposiciones con artistas discapacitados.
[1] Consejo Nacional de Evaluación de la Política del Desarrollo Social, Informe de `pobreza en México 2010: el país, los estados y sus municipios, 2012, p. 77
[2] Ibid, p. 9
[3] Ibid, p. 77
[4] Por ejemplo con recomendaciones para su visita en el New York Times. En Francine Prose, Savoring Pleasures of Puebla, Mexico, The New York Times, 10 septiembre, 2013
[5] Se desconoce qué porcentaje de esta cifra representan el PIB municipal. Sin embargo, se sabe que esta cifra equivale al 1.6% del PIB estatal para el año 2015. En Secretaría de Turismo del Gobierno de Puebla, Indicadores básicos de la actividad turística en Puebla año 2015
[6] http://turismo.puebla.gob.mx/nuestra-secretaria [consultado 28 de junio 2017]
[7] Viridiana lozano Ortiz, “El museo de 7 mil 280 millones en Puebla se inaugura pese a no estar terminado” en Sin Embargo en http://www.sinembargo.mx/10-02-2016/1616656 [consultado 3 de julio, 2017]
[8] Misión del Instituto Municipal de Arte y Cultura de Puebla http://www.imacp.gob.mx/ [consultado 3 de julio, 2017]
[9] Instituto Municipal de Arte y Cultura de Puebla, La Gaceta: agenda cultural, junio 2017, no. 39.
[10] Tema: indicadores de servicios públicos que se prestan: Instituto de Arte y Cultura, 2016, p. 3
[11] http://www.imacp.gob.mx/no-violencia [consultado 4 de julio, 2017]
[12] Tema: indicadores de servicios públicos que se prestan: Instituto de Arte y Cultura, 2016.
[13] Arturo Aguirre y Anel Nochebuena (compiladores), Estudios para la no violencia 1: pensar la fragilidad humana, la condolencia y el espacio común, Puebla: 3Norte y Afinita Editorial, 2015. Arturo Aguirre, Anel Nochebuena y María del Carmen García Aguilar, (compiladores), Estudios para la no violencia 2: pensar las espacialidades, el daño y el testimonio, Puebla: 3Norte y Afinita Editorial, 2016.
[14] Coordinación General de Transparencia, Junta Auxiliar San Miguel Canoa, con base en INEGI, Censo de Población y Vivienda 2010.
[15] En ocasiones estos datos se obtienen sólo a través del portal de Transparencia. Como en el caso de Ernesto Aroche Aguilar, “El centro histórico sigue siendo la zona más insegura de Puebla” en Lado B, junio 20, 2012, en http://ladobe.com.mx/2012/06/el-centro-historico-sigue-siendo-la-zona-mas-insegura/ [consultado 6 de julio, 2017]
[16] Visión Instituto Municipal de Arte y Cultura de Puebla en http://www.imacp.gob.mx/conocenos#AcercaDelInstituto [consultado 4 de julio, 2017]
[17] http://imacp.gob.mx/clinicas-escuelas/escuela-de-la-b
[18] El gobierno municipal impulsa el desarrollo profesional de alumnos de ballet y teatro del IMACP, noviembre 2016 en
http://imacp.gob.mx/noticias/item/2608-el-gobierno-municipal-impulsa-el-desarrollo-profesional-de-alumnos-de-ballet-y-teatro-del-imacp [consultado 5 de julio, 2017]
[19] Idem.
[20] Entrevista de autora a Rafael Navarro Guerrero, Subdirector de Desarrollo Artístico y Cultural, 21 de junio 2017.
[21] Instituto Municipal de Arte y Cultura de Puebla, La Gaceta: agenda cultural, junio 2017, no. 39, Programas Cinefilia metropolitana: cultura y naturaleza; Tallereando pp. 2, 3, 36.
[22] Entrevista de autora a Rafael Navarro Guerrero, Subdirector de Desarrollo Artístico y Cultural, 21 de junio 2017.
[23] Community Action Programme on Social Exclusion, The role of culture in preventing and reducing poverty and social exclusión, Policy Studies Findings-2, 2005
[24] Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y Justicia Penal A. C., La violencia en los municipio de México, 2015 en http://www.seguridadjusticiaypaz.org.mx/ [consultado 29 de junio, 2017 ]
[25] Xavier Rosas, “La ciudad de Puebla, ‘tierra de nadie’” en Lado B, abril 1, 2013 en http://ladobe.com.mx/2013/04/la-ciudad-de-puebla-tierra-de-nadie/ [consultado 6 de julio, 2017 ]
[26] Manuel Balcázar Villareal (coord.), Pandillas en el siglo XXI: el reto de su inclusión en el desarrollo nacional, CDMX: Secretaría de Seguridad Pública Federal y Centro de Investigación y Estudios en Seguridad, 2012, p. 17.
[27] Ibid. p. 19
[28] Idem.
[29] Ibid., pp. 52-53.
[30] Ibid, pp. 53, 188
Por qué vigilar
La necesidad de un patrimonio para todos
Por Michelle Aanderud
México cuenta con un patrimonio material e inmaterial sumamente valioso para el entendimiento de nuestra cultura. Desde hace casi un siglo, el Estado mexicano tuvo la necesidad de otorgar control de acervos, colecciones e investigaciones a distintas instancias. El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) resultó siendo el responsable de las colecciones e investigaciones de carácter prehispánico desde 1939, con la creación del Instituto bajo la orden del presidente Lázaro Cárdenas. La separación de bienes patrimoniales realizada por el Estado tiene como raíz la necesidad de salvaguardar el legado nacional dentro del territorio, evitando el tráfico y la apropiación histórica de nuestros bienes por parte de extranjeros.
Sigue leyendo «La necesidad de un patrimonio para todos»Los conceptos de educación, arte y cultura en el Plan Nacional de Desarrollo 2013-2018
Por Anel Jiménez
La planeación es uno de los medios indispensables para llevar a cabo las tareas que son responsabilidad del Estado. Un primer acercamiento al análisis del funcionamiento de cualquier sector o campo particular es indagar con respecto a las ideas que están detrás de los documentos normativos. Si bien las leyes y la constitución contienen la enunciación de un proyecto de nación a largo plazo, existen documentos concebidos para dirigir acciones en un lapso menor de tiempo. En México es mandato constitucional que el presidente y su equipo de trabajo entreguen un documento guía -denominado Plan Nacional de Desarrollo (PND)- el cual contempla los objetivos y metas a realizar en su administración. La importancia de dicho documento radica en que con base en él se realiza la asignación de presupuesto y a su vez, es la guía para realizar los planes sectoriales que se traducen en líneas de acción, estrategias, y programas públicos. Por esto, la planeación deberá ser en toda ocasión producto de un análisis que detecte las necesidades de la población en materias específicas, las áreas de oportunidad de los procesos y las capacidades de los agentes e instrumentos.
Sigue leyendo «Los conceptos de educación, arte y cultura en el Plan Nacional de Desarrollo 2013-2018»La era digital en el arte y la cultura
Por Thalía Larriva
El panorama actual de la cultura y el arte converge en un escenario digital; las nuevas tecnologías de la información y comunicación (TIC) son un ingrediente de innovación que está alterando las formas de accionar de las instituciones culturales y artísticas.
Por esta razón el Observatorio de Arte y Cultura abre una línea de investigación referente al tema y, tendrá como apéndice las siguientes cuestiones: ¿cómo están dialogando el arte y las nuevas tecnologías de la información y comunicación desde la institución, el artista, la obra de arte y su público? ¿cuál es el uso y presupuesto destinado a estos nuevos medios digitales ¿qué nuevas prácticas están generando?, y ¿cuáles son las oportunidades y vacíos legales correspondiente entre arte y las nuevas tecnologías?
Sigue leyendo «La era digital en el arte y la cultura»¿Qué se reporta por beneficio de la cultura en México?
Por Azucena Meza Uscanga
La investigación en curso tiene por objetivo analizar las variables a partir de las cuales se reporta el beneficio y alcance de la cultura en México, considerando la productividad y desarrollo económico de este sector, así como variables significativas consideradas en el ámbito internacional.
Sigue leyendo «¿Qué se reporta por beneficio de la cultura en México?»
La cultura en los municipios que conforman el Área Metropolitana de Guadalajara
Por Alejandra Petersen Castiello
La planeación y aplicación de la cultura a nivel municipal es independiente. Es decir, gracias a una personalidad jurídica autónoma que le otorga la Ley, cada municipio es libre de adaptar su reglamento a las condiciones socioeconómicas culturales o históricas de cada región.[1] Sin embargo, ¿qué sucede cuando la masa poblacional crece, desbordándose de sus límites demarcados y conformando una gran mancha urbana? En el ámbito cultural municipal, ¿existe un esfuerzo por unificar los objetivos culturales de estas áreas metropolitanas? O por el contrario, ¿cada Ayuntamiento planea y practica la cultura de forma aislada?
En este documento intentaré esbozar la manera en la que algunos municipios que conforman el Área Metropolitana de Guadalajara (AMG) asimilan y ejercen la cultura desde sus trincheras. Para ello, será necesario comprender cómo está dilucidada dentro de sus estructuras jurídicas y si en efecto, existe un hilo conductor que ofrezca alternativas culturales a la población del AMG en toda su extensión. Con ello, espero echar luz a la estructuración cultural en este primer nivel de gobierno que además, es el más cercano a la población.
Sigue leyendo «La cultura en los municipios que conforman el Área Metropolitana de Guadalajara»El camino hacia una política de colecciones que parte de la Ley de Cultura en México
Por María José Gutiérrez Padilla
En su acepción más general, una colección es el agrupamiento de objetos bajo discursos y concepciones coherentes y cohesionadas entre sí. Cada objeto posee un valor simbólico que determina su naturaleza coleccionable, la cual puede o no partir de la materialidad misma del objeto. Si bien, las colecciones podrían ser de cualquier índole, para los fines que interesan a este observatorio, la información se centrará en las colecciones que guardan una relación estrecha con el arte y su diferencia con los acervos y fondos documentales con los que, en general, son confundidas.

Epistemológicamente, la diferencia entre la colección y el acervo radica en que un acervo es el conjunto no solo de piezas semánticamente afines, sino que es la reunión de objetos y documentos que fueron útiles para el ejercicio de funciones determinadas dentro de la sociedad, las cuales pueden ser fiscales, contratos, registros de comportamientos sociales mediante imágenes, entre otras. Por otro lado, la colección tiene como función la reunión de objetos contemplativos en su forma más general. Asimismo, los componentes del acervo no necesariamente se relacionan entre sí a diferencia de la colección. Es así que un acervo puede estar compuesto por una o varias colecciones y éstas pueden ser estudiadas de manera independiente o en conjunto bajo un discurso de posicionamiento dentro del mismo.
Actualmente y de manera general, la distinción entre colección y acervo no parte de su concepción epistémica, sino de sus funciones y visibilidad ante instancias museales o de investigación; así como de su posicionamiento y visibilidad pública. Entonces, la colección se liga al ámbito privado por tener una accesibilidad de objetos limitados dentro de su discurso (aunque no siempre es así); mientras que el acervo se encuentra en el espectro público por la cantidad de componentes diversos que puede albergar. Si bien, dicho comportamiento no siempre se lleva a cabo bajo esta descripción, la distinción radica en su posicionamiento frente a las instancias mencionadas.
Con respecto a ello, el International Council of Museums (ICOM) especifica en su Código de Deontología (2006) que “la misión de un museo es adquirir, valorizar y preservar sus colecciones con el fin de contribuir a la salvaguarda del patrimonio natural, cultural y científico”. Si bien se parte de proposiciones ambiguas, dicha mención traza una ruta sobre la importancia de estudiar las colecciones de museos para su salvaguarda y preservación. Aunque dicho organismo se encarga de cohesionar y homologar las prácticas museales de manera internacional, no tiene injerencia legislativa en cada uno de los países que lo conforman; como bien lo indica su nombre es solo un consejo y si bien sus propuestas y sugerencias son tomadas en cuenta de manera general por las instancias nacionales competentes, la asignación de presupuesto para su estudio y preservación no está regulada de manera internacional.
Entonces en México, la institucionalización de las colecciones como una parte nodal del funcionamiento de los museos se denomina acervo, aunque la política de colecciones no se denomine así. Con respecto a lo observado, si bien se trata de diferenciar una categoría de otra, en la práctica dista mucho su diferencia. Se encuentran en el mismo espectro y en ocasiones es muy difícil distinguirlas más que por su naturaleza pública o privada. Lo cual trae a cuento que, si su categoría ni siquiera está delimitada, los aspectos que las circundan, en la mayoría de los casos, tampoco lo están.
Para su estudio se establece que de manera nacional, no existe una política de colecciones que brinde un panorama de cómo tratarlas para su conservación, preservación y visibilidad. Si bien desde la teoría se parte de una política de colecciones que debe contener la categorización y clasificación en su estudio, no siempre es así. Tanto los acervos como las colecciones (es su vista hacia lo público y lo privado) cuentan con diversos problemas de organización, visibilidad, presupuesto y tratamiento para su preservación. Es así que nace el eje de investigación-observación como parte de las tareas del Observatorio de Arte y Cultura.
Dichos problemas serán observados bajo las siguientes cuestiones: ¿qué determina el valor de las colecciones y acervos para que les sea asignado determinado presupuesto sobre otras? Y, ¿cómo es repartido dicho presupuesto para su conservación, visualización y posicionamiento nacional? Para ello, se parte de los organismos que se encargan o deberían encargarse de su tratamiento y de la reciente creación de la Secretaría de Cultura como agente necesario para homologar las políticas culturales en todo el país, cuya injerencia se centre en colecciones y acervos, entre otras cuestiones.
Talleres de producción de estampa en México
Por Marisol Rojas
La estampa es una disciplina artística en la que a través de un proceso de producción e impresión se obtiene una imagen. Para su creación, se necesita una matriz o placa que puede ser de metal, madera o piedra que se ha de grabar, entintar e imprimir con ayuda de un tórculo o prensa. Es importante reconocer las propiedades de los diferentes tipos de estampación, ya que cada uno posee cualidades plásticas y estéticas que han sido aprovechadas de manera diferente según sea la intención de los artistas: el grabado en relieve, el grabado en hueco, los procesos planográficos y el estarcido[1].
México ha tenido una gran trayectoria en la creación de impresos y es necesario resaltar que en sus inicios tuvieron una estrecha relación con la imprenta editorial y comercial. Es hasta la década de 1930, cuando se introduce el offset como medio de creación de imágenes múltiples, que las técnicas tradicionales de impresión paulatinamente serían reservadas para la creación de estampas con fines artísticos. En la actualidad hay gran quitar espacio cantidad de talleres de producción de estampa en donde cada uno tendrá la particularidad de especializarse en el grabado en relieve, huecograbado, litografía o serigrafía, en publicaciones posteriores se detallará su funcionamiento.
Notas acerca de los procesos de grabado
[1] En el grabado en relieve es común utilizar matrices de madera o linóleo, con ayuda de herramientas como gubias, navajas y cuchillas se hacen incisiones; al imprimir, la tinta se deposita en donde no se ha tallado, es decir, en la superficie. El grabado en hueco utiliza matrices de metal, y la incisión se hace de manera directa con puntas, punzones y ruletas o de manera indirecta con ácidos que crearán la incisión; la tinta será depositada en los surcos que se hacen a partir de estas dos maneras. Los procesos planográficos comprenden la litografía, que utiliza como matriz la piedra caliza, las laminas de aluminio o zinc y el principio básico es la repelencia entre la grasa y el agua; se dibuja con un lápiz graso, la imagen pasa por un proceso químico que incluye la aplicación de una solución de acido nítrico y goma arábiga, de esta manera, la imagen se impregnará con la tinta y las partes neutras con el agua. El estarcido se refiere a la creación de imágenes a partir de plantillas, un caso representativo es la técnica de serigrafía.
Para una referencia visual de estos procesos se puede visitar el interactivo en la página del Museo de Arte Moderno de Nueva York. Nosotros te dejamos en este enlace el vínculo directo.
La participación de las mujeres artistas en Querétaro
Por Susana del Rosario Castañeda Quintero
Datos
En el Artículo 13 de la Ley Estatal de Transparencia del Estado de Querétaro se menciona lo siguiente:
Artículo 13. Los sujetos obligados deberán documentar todo acto que derive del ejercicio de sus facultades, competencias o funciones.
Para la primera parte de esta investigación relacionada a la participación de las mujeres artistas en exposiciones de arte contemporáneo, realicé una recopilación de datos con respecto a tres espacios culturales en la ciudad de Querétaro, que dependen directamente del Instituto Queretano de la Cultura y las Artes: Museo de la Ciudad, Galería Libertad y Museo de Arte de Querétaro. A continuación se expondrán algunas de las problemáticas en el acceso a la información y bases de datos en dichas instituciones.
Sigue leyendo «La participación de las mujeres artistas en Querétaro»
De descripción de funciones a cuestionamientos sobre sus ejecuciones
Por María Sicarú Vásquez Orozco
Mucho se ha hablado de cómo funcionan las organizaciones públicas referentes a la cultura, sus prioridades, presupuestos y autoridades. Con la reciente creación de la Secretaría de Cultura se han suscitado cambios y por ende dudas sobre el funcionamiento de las distintas instancias museísticas, cuáles fueron los cambios, de qué forma se benefició el patrimonio, su difusión y su conservación.
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Sondeo de percepción 2020
El Observatorio de Arte y Cultura se ha fundado con el objetivo de vigilar las políticas culturales en México, por distintos actores dedicados a la investigación, creación, gestión, promoción, conservación, etc. Con el fin de desarrollar investigaciones que permitan incidir en beneficio del contexto actual del quehacer cultural, hemos desarrollado el siguiente sondeo de percepción.
El cuestionario presentado a continuación puede ser respondido por todo actor involucrado en el quehacer cultural que radique en México, y cuya experiencia sea mínimo de 3 años:
- Creación artística
- Gestión y promoción de la cultura y las artes
- Conservación y/o coleccionismo
- Curaduría de las artes
- Investigación de la cultura y las artes
- Trabajadores de las organizaciones o instituciones dedicadas a la cultura y las artes
- Ciudadanos cuya actividad se vincula al patrimonio cultural
El tiempo para responderlo es de 20 minutos aproximadamente. El cierre de participaciones será el 10 de noviembre de 2020.
Descargar programa III Foro sobre Políticas Culturales
Programa III Foro sobre Políticas Culturales
JUEVES 14 DE NOVIEMBRE DE 2019
12:00 – 12:30 h
12:30 – 14:00 h
Registro
Conversatorio
Los derechos culturales y artísticos en el contexto de las transformaciones políticas
Modera: Dr. Alberto Soto Cortés
Modelos de gestión cultural desde el Centro Cultural España ante las transformaciones políticas
Mtra. Eva Gómez Suárez
Coordinadora de Formación Centro Cultural de España en México
Exigibilidad de los derechos culturales
Mtra. Lisa Moncada Mercado
RedEs Cultura
Educación artística y ciudadanía
Mtro. Lesly Yobani Mendoza
Líder de Proyectos Faro Indios Verdes
JUEVES 14 DE NOVIEMBRE DE 2019
15:30 – 17:20 h
Mesa 1
Artistas y trabajadores de la cultura: condiciones del trabajo en el sector
Modera Mtra. Marisol Rojas
Los derechos económicos, sociales y culturales de los artistas en contextos de violencia y pobreza
El caso de estudio de los artistas en Acapulco, México
Javier Reyes Martínez
En este estudio cualitativo se exploraron los derechos económicos, sociales y culturales de los artistas, en un contexto de violencia y precariedad, tomando como caso la ciudad de Acapulco, México. La pregunta principal fue: ¿Cuál es la situación de los derechos económicos, sociales y culturales de los artistas en contextos de violencia y pobreza? Utilizando un diseño cualitativo de caso de estudio instrumental, se entrevistó a siete practicantes de arte (música, artes visuales, artes urbanas, actores, danza, literatura) y un promotor cultural. Se buscó indagar sobre los derechos económicos (acceso al trabajo), derechos sociales (seguridad social, vivienda, servicios de salud y nutrición) y derechos culturales (acceso a los servicios culturales). Entre los hallazgos destacan la percepción de injustica y precariedad debido a contratación informal, trabajos eventuales e indefensión ante las instituciones. Igualmente, emergió la falta de acceso a seguridad social, vivienda y servicios de salud. Además, los participantes concordaron tener una dieta poco variada o nutritiva. Igualmente, señalaron la necesidad de acceso a becas, fondos, actualización y registro de obra. Respecto al contexto de violencia y económico, indicaron que su actividad artística ha sido afectada negativa (inhibiendo las actividades y la participación) y positivamente (una fuente de inspiración y compromiso).
Javier Reyes Martínez (Guerrero, México). Candidato a Doctor en Bienestar Social. Académico en la Universidad Loyola del Pacífico y en la Universidad Iberoamericana Ciudad de México. Gestor cultural, fue Presidente del Patronato Teatro Domingo Soler de 2014 al 2016 y Director de la Feria Internacional del Libro de Acapulco 2015. Narrador, Beneficiario del Fondo Estatal para la Cultura y las Artes Guerrero 2010, premio estatal de cuento María Luisa Ocampo 2010 y premio estatal de cuento José Agustín 2010. Cursó los diplomados en “Políticas Culturales y Gestión Cultural” por la UAM; “Participación, Ciudadanía y Derecho Humanos” por la Universidad Iberoamericana y “Derechos Culturales y Megaproyectos” por el INAH. Actualmente cursa el Doctorado Internacional en Bienestar Social en Boston College y la Universidad Iberoamericana. Sus principales líneas de investigación son los derechos culturales y el bienestar, la participación cultural y las políticas culturales. Ha presentado su trabajo en Mérida, Ciudad de México y Santiago (Chile). Próximamente presentará en Lima (Perú). Recientemente obtuvo una beca por el Centro Internacional de Derechos Humanos y Justicia Social del Boston College para desarrollar la investigación “Derechos económicos, sociales y culturales en contextos de violencia y precariedad. Caso, los artistas de la ciudad de Acapulco”.
Profesionalización y posibilidades del Mercado del Arte en México
Diana Álvarez Mejía y Marcela M. Mena Barreto
Las prácticas culturales y profesionales alrededor del mercado del arte están condicionadas por áreas ajenas a la academia, lo cual ha impedido permear las características económicas con las estéticas en la valoración de la obra artística. Creemos que a través de los diálogos y reflexiones entre los múltiples entes que promueven el sector plástico y su mercado, tales como la circulación, producción y difusión, se pueden encontrar medios para la vinculación del mercado del arte con la academia y otros agentes culturales. A partir de la profesionalización de los distintos sectores artísticos, tales como la producción, gestión, investigación, así como el aspecto económico, buscamos ampliar y sentar las bases para interpretar y estudiar el mercado del arte en México. De tal manera que no se límite a estudios puramente estéticos, sociales o económicos, sino que se entienda que todos los agentes son causales y así comprender de una manera global a los artistas y su producción hoy en día.
Diana Álvarez Mejía es licenciada en Historia del Arte por la Universidad Iberoamericana y en Psicología por la UAEMEX. Realizó el curso de Valuador de Arte I impartido por Rafael Matos. Actualmente cursa la maestría en Saberes sobre Subjetividad y Violencia en el Colegio de Saberes. Ha participado en el área de investigación y curaduría con el artista Jorge Marín, impartido el curso de Valuación de Arte dentro del programa Art Followers por el departamento de Educación Continua de la universidad CENTRO. En 2016 fue ponente en el 1er Coloquio de Cultura Visual: Impresos como vehículo de la cultura visual con “El Imaginario social burgués en la Revista Moderna” y publicado en la Revista Errancia. psicoanálisis, teoría crítica y cultura (2019) el texto “Julio Ruelas: una aproximación a lo ominoso a partir de su obra artística”. Es especialista en Obra Gráfica en el departamento de Arte Moderno y Contemporáneo en Morton Subastas, así como subastadora en la misma.
Marcela Mena Barreto es Licenciada en Cultura y Arte por la Universidad de Guanajuato, Campus León. Ha realizado curadurías de modo independiente en exposiciones fotográficas. Trabajó como coordinadora en el Archivo Gustavo Casasola, colaboró como asistente curatorial en el Museo del Estanquillo, Colecciones Carlos Monsiváis. Ha realizado artículos para publicaciones especializadas de fotografía y cine, asistido al Seminario de Mirada Documental y El Sabor de la Imagen con Rebeca Monroy Nasr en el Departamento de Estudios Históricos del INAH, ha cursado seminarios escolarizados sobre teoría de la imagen, cine e historia del arte en Campus Expandido MUAC, ha tomado clínicas de catalogación y patrimonio fotográfico del Centro de la Imagen y cursó el Diplomado en Curaduría en Gimasio de Arte y Cultura con Amanda de la Garza e Iván Ruiz. Actualmente es la especialista de fotografía en Morton Subastas donde labora desde 2018.
Del Tingo al Tango: La movilidad internacional de las compañías teatrales mexicanas
Laura Tudela
A inicios del año 2000 una serie de estrategias colectivas y multinivel fueron puestas en marcha para aumentar la presencia de las compañías teatrales mexicanas en los escenarios internacionales. El deseo de internacionalización encuentra eco en los acuerdos internacionales que realiza la UNESCO y las iniciativas previas en torno a los mercados del arte, pero ¿cómo ha sido en realidad la experiencia?, ¿quiénes son los principales representantes del teatro en el extranjero?, ¿qué ven en el teatro mexicano que ha sido interesante? Y más importante aún, a casi dos décadas después del inicio de estas estrategias, ¿qué podemos aprender para el futuro? Esta ponencia tiene como objetivo compartir la investigación realizada en torno a las compañías independientes mexicanas, con el deseo de comenzar el debate, invitar a nuevas evaluaciones y enriquecer otras disciplinas, desde el diálogo, la colectividad y la visión crítica.
Laura Tudela (México, 1993) es Licenciada en Actuación por la Universidad de Londres. Maestrante en la universidad Nice-Sophia Antipolis y la Universidad de Salzburgo, ha desarrollado su trabajo teórico enfocándose en la perspectiva socio-semiótica de la práctica escénica latinoamericana. En el campo artístico profesional se ha desarrollado durante los últimos seis años en contextos nacionales e internacionales como actriz para cine, teatro, televisión y ópera, asistente de producción y dirección en teatro; así como directora y administradora de proyectos de artes escénicas en México.
Precariedad laboral y simulación en la promoción de la cultura
Mario Cruz
El tipo de contratos cada vez más flexibles, e incluso la ausencia de estos, es una realidad en la promoción de la cultura, lo que ocasiona que exista una desventaja en la capacidad de negociación entre el promotor cultural frente a su empleador. En esta ponencia analizaremos el caso de “Somos Tláhuac. Circuito de Expresión Artística y Cultural”, acción social implementada durante este 2019. Trataremos dos temas principales. El primero tiene que ver con las estrategias que permiten un cierto grado de coerción, resultado de la incertidumbre de garantías laborales para los promotores de esta acción social y las consecuencias que derivan en su quehacer. El segundo tiene que ver con los resultados formales y la difusión de estos mediante redes sociales, el papel de la fotografía como legitimación de una realidad inexistente, así como un diagnóstico de la recepción y los alcances del programa con relación al valor que se otorga a la promoción cultural.
Mario Cruz es originario del estado de Oaxaca, 1993. Estudió sociología en la UAM-X. Es fundador del colectivo «Voluntad es», con quien organiza talleres culturales con comunidades de Oaxaca. Actualmente es promotor cultural en el circuito «Somos Tláhuac» y asistente de investigación en temas de antropología social.
El modelo “non-profit” estadounidense: una alternativa a las políticas culturales en México (sujeto a cambios o sugerencias)
Ulrike Figueroa Vilchis
A pesar del valioso apoyo que brinda el gobierno a las artes y la cultura en nuestro país, la rigidez institucionalizada de las políticas culturales y el poco cambio que se ha realizado a estas desde su origen nos pintan un panorama desalentador para el crecimiento del sector artístico y cultural en México. Esto resulta en un esquema complicado para el trabajador cultural con ideas nuevas que aportar, para el artista que busca mayor impulso en su carrera y para los públicos que se mantienen en números bajos. Aunado a esto los recientes pronunciamientos del gobierno federal ponen en tela de juicio el valor de las instituciones culturales y la labor de las mismas. En esta presentación, aprendiendo del modelo estadounidense del “non-profit”, propongo adaptar este modelo organizacional como una alternativa viable para crear, promover y abogar por las artes. Sugiero pensar en este modelo como una vía de sustento y auto empleo para los trabajadores culturales, impulsar artistas, generar nuevos acercamientos con los públicos y como una oportunidad de inyectarle dinamismo al sector.
Ulrike Figueroa es licenciada en Historia del Arte por la Universidad Iberoamericana, ha trabajado a nivel nacional e internacional principalmente enfocada en museos, exhibiciones, investigación, archivos y políticas culturales. En la Peggy Guggenheim Collection en Venecia se desarrolló como Intern Coordinator dentro del Departamento de Educación, colaborando con todos los departamentos del museo. Posteriormente, trabajó para la Secretaría de Cultura federal y la Secretaría Técnica del Gabinete de la Presidencia de la República en proyectos especiales enfocados en investigación, creación de contenidos, exhibiciones y curaduría. Actualmente, Ulrike estudia la maestría en Arts Administration en Columbia University Teachers College con una beca Fulbright García-Robles y Conacyt-FINBA. Sus intereses yacen en la intersección de las políticas culturales, las artes visuales, los museos, sus públicos y la tecnología.
JUEVES 14 DE NOVIEMBRE DE 2019
17:30 – 19:20 h
Mesa 2
Patrimonio: marcos para su conservación y difusión
Modera Mtra. Michelle Aanderud Ochoa
La prevención sostenible del patrimonio cultural: una necesidad inminente
Francisco José Casado Pérez
En años recientes, hemos atestiguado grandes casos de tragedias patrimoniales a nivel mundial: desde Notre Dame de París, el Museo Nacional de Brasil y los estragos de los sismos de septiembre de 2017 en más de 2000 inmuebles y un sinnúmero de bienes mueble asociados a estos en México. Casos que han encaminado la latencia de la prevención y gestión de riesgos, mismos que de ahora en adelante deberán abordarse por medio de diversas estrategias y escalas, ¿de qué manera? Debido a la situación global actual, las acciones que se tomen de ahora en adelante deben abarcarse desde una visión compleja, como lo plantea el modelo de la sostenibilidad, el cual se rige equitativamente desde lo económico, lo ambiental, lo social y –desde hace unos años– lo cultural que, en contraste con los casos mencionados, busca presentar una posible ruta crítica de la prevención sostenible, principalmente desde la parte financiera, social y formativa; de tal modo que se cimente una base para la discusión y propuesta de nuevas estructuras normativas públicas y privadas que contemplen que la finalidad de preservar la amplia diversidad del patrimonio cultural material para las próximas generaciones va más allá de una ideología fetichista, porque el patrimonio es un activo que puede proveer amplias posibilidades de progreso y calidad de vida.
Francisco José Casado Pérez es Ingeniero Arquitecto por la Escuela Superior de Ingeniería y Arquitectura del Instituto Politécnico Nacional y Maestro en Conservación y Restauración de Bienes Culturales Inmueble por la Escuela Nacional de Conservación, Restauración y Museografía “Manuel del Castillo Negrete” del INAH. Ha sido ponente en una decena de eventos dedicados al tema de patrimonio cultural y su conservación, así como autor de diversos artículos de investigación y ensayos sobre teoría de la conservación y restauración del patrimonio cultural en revistas digitales a nivel internacional.
Pueblos mágicos: fortalecimiento o desgaste de la cultura
Samantha Vargas
La cultura ha pasado a ser un elemento fundamental en la industria del turismo a partir de la formulación de políticas públicas turísticas que la han integrado como una herramienta de desarrollo humano y económico. Son las manifestaciones creativas que han logrado posicionarse, a ojos de expertos, en patrimonio cultural por su valor estético, histórico e intelectual, principalmente porque brinda sentido y significado a la realidad colectiva de los habitantes que conviven diariamente. Hablamos de los paisajes, las calles, los monumentos, la comida, la tradición oral, el lenguaje, etc. Todo ello forma parte de la identidad que define y caracteriza una comunidad; ahora vista como un potencial de mercado llamado turismo cultural dentro del Programa Federal de Pueblos Mágicos. La discusión hacia esta política pública girará en torno a dos estudios de caso que han mantenido el programa destacando las formas de organización para fortalecer o descuidar el patrimonio cultural, así como los beneficios y afectaciones hacia sus habitantes.
Zuleyma Samantha Vargas Guijosa, originaria de Tacámbaro, Michoacán, es Licenciada en Lengua y Literaturas Hispánicas por la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo. Es maestrante en Derecho con opción en Humanidades en la División de Estudios de Posgrado de la misma institución. Desde el 2015 es gestora cultural certificada por Secretaría de Cultura y Secretaría de Educación Pública y mediadora de lectura por el Programa Nacional de Salas de Lectura. Ha coordinado y colaborado en distintos proyectos culturales enfocados a las artes y el fomento a la lectura. Actualmente es miembro de la Asociación civil Raíces a una voz, miembro del Comité de Pueblos Mágicos y Profesora de Literatura en la Casa de la Cultura Marcos A. Jiménez en Tacámbaro, Michoacán.
Limbos arqueológicos: Modelos de gestión alternativos del patrimonio prehispánico en México
Víctor – Robles
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El Instituto Nacional de Antropología e Historia es la única instancia autorizada legalmente para investigar, preservar y poner a disposición del público el legado ancestral de todos los mexicanos, funcionando como un “monopolio administrativo” que gestiona hoy 192 zonas arqueológicas abiertas oficialmente. Sin embargo, es un secreto a voces que existen muchas otras que operan sin reconocimiento institucional ni regulación que garantice la seguridad de los vestigios y de sus visitantes. Estos sitios extraoficiales pueden ser llamados “limbos arqueológicos” puesto que son espacios que quedaron atrapados entre el proceso de registro, investigación, restauración y habilitación, así como entre las lagunas jurídicas del régimen patrimonial. Ésta es una cordial invitación para descubrir tres de estas rutas alternativas: concretamente, la administración privada, la municipal y la ejidal, haciendo una breve travesía por el desierto sonorense, la ciudad de Mérida y el Valle del Mezquital.
Víctor es un investigador cultural y, actualmente, estudia la maestría en antropología en la Universidad Nacional Autónoma de México (IIA-FFyL). Allí, se encuentra desarrollando el “proyecto limbo”, un estudio sobre algunos sitios arqueológicos extraoficiales, documentando las prácticas de usufructo por parte de terceras personas del patrimonio prehispánico a lo largo y ancho del territorio nacional: como los sombreros Tardan, “de Sonora a Yucatán”.
Patrimonio para la acción colectiva
Carolina Benítez
En esta presentación se busca problematizar la concepción del patrimonio cultural, más que como un sustantivo, como práctica cultural incorporada a la cotidianidad. Para ello se presenta el caso del patrimonio local de la comunidad indígena de Mezcala, en el municipio de Poncitlán, Jalisco. Donde sus fiestas, el territorio, la música, la memoria histórica, entre otros, pasan por un proceso de patrimonialización local, como lo llama el antropólogo Llorenç Prats; donde se ven preponderados por una parte la memoria colectiva e identidad y, por otra parte, los significados que le atribuyen los propios mezcalenses a dichas manifestaciones culturales. Finalmente, se hará un análisis sobre cómo la activación y revalorización de este patrimonio local, a través de ejercicios artísticos colaborativos (cine documental y escritura) puede volverse un símbolo para la resistencia política, la soberanía cultural y las acciones colectivas, en un contexto como el de la comunidad coca de Mezcala, que como muchos pueblos originarios en México, no es reconocida a nivel estatal como comunidad indígena por falta de algunos “rasgos tradicionales” como lo son la lengua madre o una vestimenta típica. Se muestra al patrimonio cultural como esos recursos comunitarios, institucionalizados o no, que tienen una función social específica en la comunidad.
Egresada de Gestión Cultural por el ITESO, con especialidad en Políticas Culturales de Base Comunitaria por la FLACSO. Aficionada de la Antropología. Anteriormente he trabajado en colectivos y en la función pública. Actualmente me dedico a la realización de proyectos sociales, culturales y artísticos de desarrollo comunitario en el Área de Arte y Cultura de Sarape Social, agencia de comunicación y proyectos sociales. Colaboro también en Pata de Xolót, proyecto de turismo cultural; así como con otras mujeres en colectivas feministas.
La participación social de las comunidades en la conservación y difusión del Patrimonio Cultural
El marco jurídico vs. sus realidades locales de actuación
Jesús Mario Rivera Hernández
La conservación del patrimonio cultural de la nación es responsabilidad casi exclusiva de la rectoría del estado, embestido en sus instituciones federales, limitando muchas veces la actuación de las comunidades y de la sociedad civil para su protección; sin embargo, existe un marco jurídico como organismos auxiliares, aunado a políticas públicas que muchas veces no obedecen a las dinámicas sociales y culturales de estos actores, lo que ha provocado diversos conflictos y malas prácticas. Se hará un breve análisis de las vicisitudes jurídicas y su reflexión para la conservación del patrimonio cultural, así como su necesario cambio de paradigma para la construcción como un derecho cultural de estos grupos sociales y su participación activa. Un tema complejo por diversas causas, intereses y actores que es fundamental conocer para encontrar un adecuado equilibrio entre el marco legal de la responsabilidad del Estado y del derecho de la comunidad para la conservación del patrimonio cultural y lograr un colaboración real, transversal, coordinada y corresponsable.
Abogado y gestor cultural, cuenta con un diplomado en Derechos Humanos por la UACM y otro de Gestión Cultural, Patrimonio y participación ciudadana por la Secretaria de Hacienda y Crédito Público en colaboración con la UNAM y la Secretaria de Cultura de la CDMX. En el ámbito laboral de 2012 a 2014 se desempeñó como enlace jurídico de la Dirección de Exposiciones del INAH, realizando gestión de contratos de exposiciones nacionales e internacionales. En 2015 trabajó de manera independiente como asesor y gestor para artistas y asociaciones civiles enfocados en la cultura, destacando el trabajo realizado con la Compañía Artística Ballet Metropolitano A.C. y Antropología y Medios A.C.; desde 2016 a la fecha se desempaña como asistente especializado de la Subdirección de Inventarios del INAH, realizando gestión de contratos de préstamo de bienes culturales a largo plazo, comisario y fotógrafo para la actualización del Sistema Institucional de Control de Colecciones. Colaboró en 2014 con Espacios Comunitarios del INAH para la Primera Reunión de Enlaces, Opciones para Impulsar la Museología Social; y en el Décimo Segundo Foro Académico: Conservación del patrimonio, vinculación social y comunidades, del ENCRyM.
19:30 – 20:30 h
Presentación III Informe del Observatorio de Arte y Cultura
VIERNES 15 DE NOVIEMBRE DE 2019
11:30 – 12:00 h
12:00 – 13:50 h
Registro
Mesa 3
Educación artística en la formación ciudadana
Modera Mtra. Susana del Rosario Castañeda
La experiencia estética desde el aula: detonante para una reestructuración del individuo
María Fernanda Muñoz
colectivodeartelaespiral.webnode.es
La Educación Artística permite entender la dinámica de la sociedad contemporánea y promover espacios de resistencia frente al aplacador sistema punitivo y controlador que aún persiste en una gran cantidad de escuelas del país, bajo un modelo pedagógico tradicional. A pesar de los esfuerzos del Ministerio de Educación para establecer un currículo flexible y humanista, acorde a la realidad del espectro artístico y cultural, que integra diversas disciplinas como la música, cine, artes visuales, teatro, danza, fotografía, gastronomía, saberes y creencias ancestrales o artesanías; aún queda pendiente la aplicación consciente del mismo, lo que demandaría un mayor compromiso y esfuerzo por parte de toda la comunidad educativa, para emprender procesos de investigación y desarrollo de proyectos colaborativos, que propendan a un mejoramiento de las dinámicas educativas.
Licenciada en Artes Visuales con Mención en Artes Aplicadas y docente de Educación Media en Arte y Estética. Candidata a la Maestría de Emprendimiento y Gestión de Proyectos Culturales por la UNIR. Co-fundadora del Colectivo de Arte «La Espiral». Promotora de la Consultora de Arte, Educación y Cultura «Aprendre de l´ experiencia», dedicada a formar públicos de diversas edades en temas de Arte Contemporáneo. Promotora de Proyectos de Arte Colaborativo. Cuenta con experiencia en el manejo de diversas técnicas plásticas: dibujo, pintura, cerámica, textiles y tapices.
La Revolución Industrial Cultural
Una visión de imposibilidad o posibilidad
Mariana Chávez Lara
Así como la Revolución industrial moldea desde sus orígenes los modelos de producción para una mayor explotación y consumo, me atrevo a afirmar que en nuestra era vivimos una Revolución Industrial Cultural. Sin embargo, esta revolución atañe principalmente al ámbito ontológico y busca controlar las formas de creación y transmisión de saberes. Max Horkheimer & Theodor Adorno en su ensayo Dialéctica de la Ilustración, escriben que “el mundo entero es conducido a través del filtro de la industria cultural” y es evidente que, de acuerdo a esto, se desplazan a muchos ámbitos de la sociedad, creando nuevas definiciones y discursos en favor del crecimiento económico y de la hegemonía cultural, por lo que me parece pertinente estudiarlas a partir del concepto de dispositivo de poder. Partiendo de esto, la industria, como dispositivo, para sustentar su desarrollo, sus decisiones y para embellecer las apariencias, va creando discursos y narrativas en donde el arte, la educación y la cultura son importantes agentes de cambio social; esto, simultáneamente, crea redes de apoyo para el mismo dispositivo de poder y control. Para esta tarea, se basan en los programas e iniciativas de educación artística, ya que en ellos existe un vasto mundo de posibilidades o imposibilidades que me parece necesario analizar y tratar de comprender sus políticas, perspectivas y discursos.
Mariana Chávez Lara es Egresada Cum Laude de la Escuela Superior de Música, realizó estudios en flauta transversa y traverso barroco. A principios de 2012 fue seleccionada para participar en una residencia en la ciudad de Nueva York, con The Academy -programa del Carnegie Hall, de Juilliard School, del Departamento de Educación del Estado de Nueva York y del Weill Music Institue- que busca no sólo construir carreras de altos niveles en músicos jóvenes, sino también, la creación de iniciativas artísticas con un fuerte compromiso social y educativo. Además de participar en importantes orquestas y ensambles del país como la Capella Barroca de México, Orquesta del Estado de Hidalgo, Ensamble Raga, entre otros; a la par ha realizado trabajo de logística, gestión y producción para diversos festivales de música y para el canal de televisión Capital 21. Actualmente es maestrante en Estudios de Arte en la Universidad Iberoamericana dentro de la línea de investigación Arte y Educación.
La importancia del análisis e interpretación de las identidades culturales en las carreras del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño de la Universidad de Guadalajara
Manuel Celestino Flores Bravo
Se habla sobre las estrategias educativas que se realizan en el Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño de la Universidad de Guadalajara para que sus estudiantes reconozcan y respeten diferentes identidades culturales presentes en la elaboración de políticas públicas. Lo más importante es el trabajo colaborativo que se da entre los estudiantes de distintas licenciaturas para llegar a posibles soluciones en torno a las políticas públicas. Los alumnos del área de Arquitectura y urbanística interiorizan en el trabajo artístico y creativo para que hagan cierres cognitivos propios sobre la importancia de estas manifestaciones en el entorno urbano y los alumnos de las áreas de Artes trabajan en temas de desarrollo urbano a través de políticas culturales. Como resultado obtenemos propuestas de soluciones interdisciplinarias por parte de estudiantes para la socialización de políticas públicas que parten de un diseño artístico.
Manuel Celestino Flores Bravo es politólogo y Maestro en Gestión y Desarrollo Cultural, ambos grados por la Universidad de Guadalajara (UDG). Actualmente se desempeña como académico en la UDG, impartiendo clases a nivel pregrado y posgrado. Se especializa en temas de políticas públicas en el campo de la cultura. Forma parte del Comité Académico de la Cátedra de Arte, Poética y Literatura Fernando del Paso. Ha sido evaluador CIEES para programas de licenciatura en las áreas de Arte y Cultura
El acontecimiento del SIF (Seminario de Investigación Feminista) desde las artes en la Facultad de Artes y Diseño UNAM
Luisa G. Tolentino
¿Qué es la ciudadanía, para qué comprenderla en dimensión amplia y cómo trabajar esas claves con una pedagogía desde las artes? En el horizonte del problema como historia dominante (Morgan, 2000), ya por todas y todos son sabidos los escenarios actuales en las escaladas formas de violencia, tan así que han alcanzado a los espacios educativos/formativos en todos sus niveles. En consecuencia, es urgente atender los síntomas cotidianos: acoso, hostigamiento (sexuales o no), relaciones “románticas” de profesorado con estudiantes, hasta las agresiones y violencia sexuales. Por lo tanto, ante el desaliento, se hizo inaplazable idear otras historias. El SIF propone las artes como las historias alternativas (Morgan, 2000) que nos convocan para imaginar, pensar, hacer y sentir de forma efectiva por inmediatas. En tal sentido, el propósito que persigue el SIF es la construcción de un lugar seguro para el fortalecimiento de sus hacedoras hacia el desarrollo de investigación y educación/formación artísticas. Entre los hallazgos, están el trabajo con la experiencia para la construcción de un punto de vista para otras comprensiones en las relaciones con el mundo, la construcción de un lugar legítimo de enunciación, la trascendencia que conlleva un posicionamiento como plataforma; por decir algunos.
Luisa G. Tolentino, Acultzingo, Veracruz. Doctoranda en Estudios Latinoamericanos (campo de conocimiento, cultura), UNAM; trabajo con el proyecto, “Mirada, cuerpo e imagen, entre orgullos y congas. Ciudad de México y La Habana Cuba [Una investigación visual basada en la Fotografía].” Realicé la maestría en Artes Visuales (orientación en diseño y comunicación visual) UNAM y las licenciaturas en Derecho y Artes Plásticas (opción gráfica, sub-opción diseño gráfico), ambas por la Universidad Veracruzana. Soy docente por asignatura “A” y acompaño el Seminario de Investigación Feminista desde las Artes en la Facultad de Artes y Diseño UNAM. En el ámbito académico, pertenezco a dos grupos de investigación: Intervenciones Críticas Desde el Arte Contemporáneo ICDAC-FAD-UNAM y Estudios Avanzados del Cuerpo ESCUE-CEIICH-UNAM. También soy integrante de “Derecho, Affidamento y Sororidad DAS, A. C.”, quienes trabajamos en la revisión de la relación entre violencia e interseccionalidad a través de cursos, talleres y ponencias en los ámbitos educativo y gubernamental. Además de La Colectiva Interdisciplinaria “Ensamble Cuerpos en Protesta”, en una atracción de metodologías de las ciencias sociales para las artes visuales, espacio y escenario. Asimismo, estoy configurando de modo simultáneo distintos proyectos individuales que articulan artes, diseño, educación y feminismos.
La educación artística y las nuevas tecnologías de la información y la comunicación: entre la exclusión y el derecho
Lizbeth Arianne Neri Cabrera
Históricamente, los gobiernos federales mexicanos han relegado el apoyo y acceso a la educación, particularmente con la educación artística, a la vez que reconocen discursiva y legislativamente de forma cada vez más amplia derechos humanos, como el derecho a la cultura y a la educación; sin embargo, durante los últimos 2 sexenios, se han emprendido políticas públicas en materia de educación a distancia como alternativa y respuesta paliativa ante la falta de apoyo a la educación presencial, ofertando desde instituciones como la Universidad Abierta y a Distancia de México diversas carreras, pero ninguna relacionada directa o indirectamente a la formación en arte. La presente ponencia tiene el objetivo de describir el avance de la educación a distancia apoyada por el gobierno federal en México y proponer el apoyo de carreras y espacios de formación a distancia en materia artística que garanticen de forma eficaz los derechos humanos implicados, sin dejar de plantear la necesaria reestructuración y re-entendimiento de la importancia social e histórica de la formación artística como agenda relevante para la sociedad y cuestionar el adelgazamiento del Estado para replantear uno más activo en la cultura.
Lizbeth Arianne es egresada de la Licenciatura en Pedagogía en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM; con certificación en el Diplomado en Formación para la Educación a Distancia en la Coordinación de Universidad Abierta y Educación a Distancia (CUAED-UNAM) Online education manager. Ha realizado actividades de apoyo a la investigación como becaria en la CUAED y una estancia de investigación internacional en la Universitat Pompeu Fabra en Barcelona desarrollando el proyecto: Blended Learning Models and their current impact; an analysis with edCrumble. Ha sido ponente y participante en foros académicos con temas afines a la tecnología educativa en UNAM, UAM y la Escuela Normal Superior de México.
Issac Roberto Martínez Barraza es egresado de la Facultad de Derecho UNAM; Fundador y Secretario General de la Red Iberoamericana Juvenil de Derecho Administrativo (RIJDA); realizó una estancia de investigación en la Universitat Pompeu Fabra, Barcelona, con la Dra. María Isabel González Pascual en Derecho Constitucional. Ha sido ayudante de Profesor en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, con el Dr. Lorenzo Meyer Cossío; Apoyo a la investigación científica en el Instituto de Investigaciones Jurídicas, UNAM con el Dr. Jaime Cárdenas Gracia; Verano de la Investigación científica con el Dr. Ricardo Espinoza Toledo, UAM- Iztapalapa. Ha sido ponente en congresos nacionales e internacionales en la Universidad Andina Simón Bolívar, UNAM, UAM y UACM. Participó en el seminario internacional Oral Adversarial Skill Building Immersion Summer, en The University of San Diego, California, USA. Entre sus publicaciones destacan: “Organismos Constitucionales Autónomos en América Latina, Rediseño y Democracia”, «Hacia el garantísmo normativo y la transparencia institucional”, 2018 y “Ciudadanía integral y Género, elementos fundamentales para el Estado Constitucional”, Facultad de Derecho UNAM, 2019.
VIERNES 15 DE NOVIEMBRE DE 2019
15:30 – 17:20 h
Mesa 4
Derechos culturales de los usuarios y públicos
Presentación María José Gutiérrez Padilla
Vale Teatral, una propuesta desde un espacio independiente
Alejandra Serrano
La Ley General de Cultura y Derechos Culturales, establece en su Artículo 8° que «La Secretaría de Cultura coordinará y promoverá el programa de asignación de vales de Cultura con la participación del sector social y privado, de las entidades federativas, de los municipios y de las alcaldías de la Ciudad de México, para incrementar el acceso a la cultura de los sectores vulnerables». Esto no ha sucedido, sin embargo, en una iniciativa local entre el Ayuntamiento de Xalapa y una organización civil se está buscando llevar esta ley a la realidad. La colaboración entre organizaciones de la sociedad civil, ONGs, y los órganos de gobierno puede darse de muchas maneras mientras exista comunicación y voluntad de ambas partes, generando beneficios para ambos y para la sociedad en general.
Periodista e investigadora de teatro. Licenciada en Literatura Dramática y Teatro por la UNAM, es parte del Centro de Documentación Teatral Rodolfo Usigli (CITRU), preside la OSC Teatromexicano Punto Com y es gestora y administradora del Foro Teatral Área 51 de Xalapa, Ver. Recibió el Premio Internacional de Dramaturgia Teatro por la Dignidad 2017 con la obra de su autoría: Las que se quedan. Dirige y desarrolla el anuario Teatro en los Estados desde 2007 y el portal teatromexicano.com.mx de 2009 a la fecha. Formó parte de la organización del Festival de la Joven Dramaturgia por más de diez años. Es autora de diversas publicaciones especializadas entre las que se cuentan La Capilla, sesenta años (Textos de la Capilla) y Compañía Titular de Teatro de la UV, Testimonios de sesenta años (Editorial UV), entre otras. Actualmente estudia la Maestría en Investigación Teatral del CITRU.
En defensa de la ceguera, sobre los derechos de las audiencias con discapacidad
Dana Albicker
En el mundo de las imágenes la ceguera es entendida como deficiencia, un sistema de exclusión que estigmatiza la diferencia y se le marginaliza desde el pensamiento único. Las personas con discapacidad (PcD) han luchado históricamente por sus derechos fundamentales como la capacidad jurídica, los derechos sexuales y reproductivos, la salud, educación digna, y los derechos culturales son usualmente ignorados. La industria cinematográfica mexicana no realiza accesibilidad de las más de 180 películas que realiza al año, la ley de telecomunicaciones planteó derechos de las audiencias con discapacidad, pero no hay avances significativos ni materialización. La mayoría de las historias que generan representaciones vinculadas a las PcD en el cine continúan siendo basadas en la estigmatización, la discriminación, desconocimiento de sus experiencias, de retos diarios que enfrentan junto a sus familias, incluso desconociendo su misma existencia y su nombre. Compartiré la historia de Cine para imaginar y el laboratorio de lo invisible: taller de creación audiovisual para personas con y sin ceguera, proyectos que, a partir de las posibilidades, de las personas y de sus vínculos, desde las prácticas afectivas del cuidado y la escucha mutua, ponen en juego el desplazamiento de la mirada y fomentan autonomía de las PcD.
Fotógrafa y realizadora audiovisual involucrada en la producción y acompañamiento de proyectos en los que la investigación artística y lo participativo son ejes transversales. Parte del Seminario de Producción Fotográfica del Centro de la imagen en 2016. Beneficiaria del Programa de Apoyo a la Docencia, Investigación y Difusión de las Artes (PADID) a través del Centro Nacional de las Artes 2017 y 2018 con el proyecto «Laboratorio de creación audiovisual para personas con y sin Ceguera» realizado en el Centro de la Imagen en CDMX y Centro de las Artes de San Agustín, Oaxaca. Es parte del colectivo Cine para Imaginar, proyecto que desde 2011 produce accesibilidad a los medios audiovisuales y realiza talleres y proyecciones de cine sobre cine y discapacidad. Beneficiarios del Programa de Fomento a Proyectos y Coinversiones Culturales FONCA 2014 y 2018.
Experiencias de la Poesía en Voz Alta: La palabra-cuerpo como vehículo para descubrirse y explicarse a los otros
Ekatherina Sicardo Reyes
es-la.facebook.com/poetryslammexico/
es-la.facebook.com/poesiaytrayectoac
La poesía en voz alta es una disciplina que ha inundado los rincones de la ciudad y de algunos estados del país. En esta presentación se pretende discurrir sobre el poder de la palabra-cuerpo, interpretada como un bien común y, por tanto, como forma colectiva de tomar posición que más allá de la construcción de artistas-genios, genera vínculos afectivos que privilegian la construcción de comunidades que gestionan sus propios espacios culturales. Nos enfocaremos en experiencias de Poetry Slam, de la mano del poeta Comikk Mg.
Estudiante de Historia del arte en la Universidad Iberoamericana y de Filosofía en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM. Escribe para Ibero 90.9 y ha participado como guía en el Museo Nacional de Arte y como maestra en el Museo Memoria y Tolerancia. Interesada en los fenómenos culturales y sus intersecciones políticas y de género. Entusiasta de la época novohispana y de los proyectos colectivos autogestivos contemporáneos.
El desmantelamiento de una comunidad cultural: el caso de Faro Aragón
Ricardo García Ortega
En poco menos de dos años y medio, el centro cultural Faro Aragón se erigió como uno de los principales referentes culturales y artísticos de la zona nororiente de la Ciudad de México y para la enseñanza focalizada en proyectos audiovisuales y cine. Ello le permitió desarrollar en dicho periodo poco más de 90 proyectos de cortometraje -ficciones, documentales, animaciones, experimentales, programas infantiles, videoclips, cápsulas y promocionales-, además de atender a más de 7 mil personas, entre niños, adolescentes, adultos y adultos mayores en sus talleres y eventos culturales y artísticos. Aunque lo más importante fue -como lo manifestaron las distintas encuestas- que se conformó una convivencia, una conjunción de intereses, una comunidad alrededor de la cultura y el arte; todo lo cual permitió, además, la capacitación de los usuarios en el arte del cine y el video, varios de ellos que están ahora integrados en la industria cinematográfica y audiovisual, y otros que conformaron grupos, colectivos o empresas culturales y han exhibido ya sus largometrajes. No obstante el éxito del proyecto, las autoridades de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México llevaron a cabo un proceso de desmantelamiento, no sólo de los talleres audiovisuales, sino principalmente de la integración comunitaria conformada; todo ello en aras de una política cultural endeble, alejada de los intereses y de las condiciones socio-culturales de la población usuaria de esta zona de la Ciudad de México.
Ricardo García Ortega es Licenciado en Sociología por la UNAM, donde también estudió filosofía. Tiene un diplomado en Mercadotecnia Política en el ITAM, cursos de economía y política en el CIDE, además de estudiar la maestría en Procesos Electorales. Estudió literatura, teatro, poesía y guionismo en la Escuela de Escritores de la SOGEM, y ha participado en diversos talleres literarios. Ha llevado cursos de Guionismo Cinematográfico en Escribecine –con Alexandro Aguirre Tanus y Angélica Ramírez-, y de Guión para series –con Enrique Rentería-, así como de Producción para Series de TV en Morpho Media y el Sindicato de Trabajadores de la Producción Cinematográfica (STPC), con Carlos Taibo, Harold Sánchez, David Ruiz, Adrián Zurita y Marcel Ferrer. Cursó además el Taller para el Desarrollo de Argumentos Cinematográficos para el público Infantil, con Nadia González Dávila en el IMCINE. También cursó talleres de guionismo, realización, fotografía y producción cinematográfica en el Faro Aragón, con David Gerstein Villanueva(+), Uriel López España, Itzia Pintado, Carlos Arriaga, Santiago Celorio, Anais Pareto, Santiago Huerta, Esme Jofre y Janaina Moraes. Realizó crónicas, entrevistas y reportajes en los periódicos “El Día” y “Excélsior”; diversos estudios en el Centro Nacional de Investigaciones Agrarias; poesía, novela, cuento, ensayo y biografía histórica; libretos de teatro y microteatro; guiones de corto y largometraje; carpetas para la producción de cortos de ficción y documental, y actualmente elabora la biblia de series de TV en los géneros de ciencia ficción, político-policiacas y para miniseries infantiles.
Encuentros y desencuentros: Los derechos culturales frente a la cultura laboral en la Biblioteca Vasconcelos
Ricardo Rafael Gómez Aguilar
El año pasado, Daniel Goldín junto a todo su equipo de expertos, junto con quienes construyó a lo largo de su administración un proyecto sólido de biblioteca, en el documento “La biblioteca Vasconcelos: una biblioteca viva” , nos presentó una mirada sólida, sensible y comprometida respecto a lo que significa ser una biblioteca pública, mismo que cito a continuación : “Una institución en transición en un momento de transformación (crisis) de los conceptos (valores) relacionados con el libro y la lectura: la verdad, la memoria, lo público, lo personal, lo privado y lo íntimo, lo real y lo virtual… Un agente para procurar conocimiento, reconocimiento y participación.” (2018). Ciertamente, esta visión remite a la construcción de espacios de encuentro, hospitalarios y afectivos, de tiempos para ser y estar en comunidad de manera libre; recinto donde transita lo virtual y lo físico difuminado en los saberes, haberes y deseos, no sólo de los acervos, sino de todos los usuarios, de aquellas personas, familias y públicos que se han ido apropiado de este gran arsenal de cultura y humanidad. Soy un ciudadano usuario de la biblioteca más grande de Latinoamérica, además de ser colaborador/bibliotecario en la sala infantil, lo que me ha permitido mirar de cerca como ha venido tejiéndose y madurando este proyecto, realidad evidente donde la prioridad es que cada persona se asuma como sujeto de derechos, en otras palabras, que cada visitante decida de manera libre y autónoma qué ve, qué lee, cómo participa, de qué manera puede involucrarse para ejercer su ciudadanía (el voluntariado es un claro ejemplo), entre muchos otros puntos. En este sentido, la idea arcaica de biblioteca cerrada y en silencio queda anulada, para poder jugar constantemente con este concepto de biblioteca viva, donde las artes se reúnen, donde los jóvenes pueden bailar, donde los indigentes pueden refugiarse y descansar, donde los bebés tienen un espacio pensado en sus necesidades y condiciones, donde la inclusión y la celebración de la diversidad no son discursos, sino son realidades. Sin embargo, la complejidad y encaminamiento a promover estos derechos pareciera ser una batalla silenciosa, donde el que debiera ser el principal aliado se ha venido afirmando como el gran enemigo: la cultura laboral. Esta problemática abarca distintos vértices. Por una parte, la desactualización de los bibliotecarios, la falta de un proyecto de capacitación sostenido y las condiciones físicas para laborar. Por otro lado, la desvirtualización de lo que representa “el sindicato”, pasando a ser un órgano que respalda el desinterés laboral, en tanto a lo que significa el cumplimiento de un objeto de contrato. Y, por otra parte, la transición política que está viviendo el país, lo cual se demuestra con la toma de decisiones en el sector cultural. Esta transversalidad de contrastes entre la cultura laboral y los derechos culturales es el principal factor que obstaculiza el desarrollo de este proyecto de biblioteca, lo que me hace cuestionar la función del servidor público y la necesidad de revisar y reconstruir los esquemas de quienes laboramos para promover los derechos de la sociedad mexicana.
Ricardo Rafael Gómez Aguilar es licenciado en Lenguas y Literaturas hispánicas, por la Facultad de Filosofía y Letras, de la UNAM. Se ha formado y desempeñado como mediador de lectura, cuya área de especialización es la literatura infantil y juvenil (LIJ) y la construcción de comunidades lectoras con niños, niñas y jóvenes; gestor cultural y tallerista independiente, por lo que ha participado como narrador oral, cuentacuentos, lector en voz alta y padrino de bibliotecas escolares en diferentes escuelas de la CDMX, desde preescolares hasta nivel medio superior; actividad que lleva realizando desde hace cinco años, y en recintos como la FILIJ y La Feria de Libro Internacional del Zócalo. Participó como lector en la selección de libros para el Nuevo Modelo educativo, 2018; coordinó la sala de lectura en el hospital Juárez de México, por parte de Leer Contigo A.C. y gestó el proyecto estudiantil de profesionalización de mediadores de lectura Cuentacuentos UNAM, de 2013 a 2015. Actualmente es Director Educativo de Fundación REDUSE A.C., ONG que orienta su labor en proyectos para sensibilizar a la población infantil y juvenil sobre la cultura ambiental, a través de la mediación de lectura y el arte. Asimismo, es colaborador en la Sala Infantil de la Biblioteca Vasconcelos, donde desarrolla proyectos de intervención con los usuarios desde un enfoque de los derechos humanos y ciudadanos; además, se desempeña como tallerista independiente para la capacitación y profesionalización de mediadores de lectura.
VIERNES 15 DE NOVIEMBRE DE 2019
17:30 – 19:20 h
Conversatorio
Estudios de caso y gestiones de proyectos independientes
El arte de “lo alternativo”. El modelo de gestión en espacios culturales independientes
Teresa Lazcano
proyecto.valuarte@gmail.com
Actualmente, autoridades y artistas se encuentran ante un momento coyuntural de transformación entre el modelo del artista subsidiado y la propuesta de la “empresa cultural” impulsada por una lógica de mercado no asimilada aun por la mayoría del gremio artístico. Una divergencia ha de decirse, de lo que se entiende por cultura y su proceso creativo entre ambas partes. Ante la existencia de un modelo gubernamental donde la oferta cultural es limitada, es que los espacios culturales independientes toman fuerza. En estos se alberga la posibilidad de construir comunidad y de tener acceso a una variedad importante de ofertas artísticas. En este caso, lo alternativo en el consumo, es parte de los derechos culturales que deben de procurarse, así como ha de procurarse que el mismo sector de artistas independientes tenga la oportunidad de tener un trabajo digno y bien remunerado. Pero, ¿cómo trabajar por convertir los proyectos independientes en modelos económicos sustentables? Esta ponencia busca la reflexión, y la propuesta de trabajo para iniciar este proceso.
Antropóloga Social por la Escuela Nacional de Antropología e Historia, con maestría en Políticas Metropolitanas y Doctorante en Ciencias antropológicas por la Universidad Autónoma Metropolitana. Con más de 15 años de años de experiencia en diagnósticos y evaluación, ha desarrollado proyectos con grupos sociales diversos, donde el enfoque de su trabajo ha sido mayoritariamente: el análisis de la cultura y su disfrute. Ha realizado diversas actividades dentro de la docencia, la investigación, y la gestión cultural, enfocándose actualmente en su proyecto «Valu-arte», desde donde realiza trabajos de consultoría para la evaluación y el fomento a la economía de espacios culturales alternativos en la CDMX.
Primera década de la Colección Oqli, acervo que crece a través del intercambio lentes/arte.
Toño Cedeño
acedenno.wixsite.com/oqlitemoaya/physicians
A lo largo de una década en la Colección Oqli de Arte Contemporáneo han sido confiadas diversas obras de artistas que, sin pagar en efectivo logran adquirir lentes graduados para sí mismos o para familiares e incluso amigos. Se trata de una forma de intercambio que puede ser considerada como una alternativa -que si bien no fomenta el mercado del arte-, sí soluciona los requerimientos que un artista tiene para que la carencia económica no sea un factor que impida cubrir las necesidades de salud visual, ya sea para uso personal o incluso de algún miembro de su círculo más cercano. El intercambio o trueque tiene en este caso la oportunidad de ser revalidado como experiencia de vinculación que toma más fuerza incluso a través de las redes sociales. En este caso se trata de un fenómeno que da para analizar las diferentes maneras que existen no solo para la adquisición, sino para la exposición de las piezas de un acervo, en tanto que varias de las pinturas, fotografías, esculturas, son expuestas permanentemente en la óptica Oqli conformando de tal forma un espacio «híbrido», que si bien se dedica a la atención visual, es un escaparate de artistas que son representativos de sus diferentes áreas para la primera y segunda década del siglo XXI en México. Cabe agregar que la Colección Oqli fomenta actividades relacionadas con el arte y la salud visual para poblaciones económicamente vulnerables.
Toño Cedeño (20 de mayo de 1970, CDMX), estudió la carrera de Optometría, en la Escuela Superior de Medicina del IPN y enfocó su formación posterior en diferentes áreas vinculadas con el humanismo; se matriculó durante quince años como estudiante de Teología, Comunicación y Arte (principalmente en la Universidad Iberoamericana y en Casa Lamm); en 2005 obtuvo el grado de Doctor en Historia del Arte. El análisis teórico de la imagen le ha dado la oportunidad de experimentar recursos del collage y la acuarela, lo que le ha permitido participar en varias exposiciones individuales y colectivas. Actualmente es Director del Grupo Oqli (que abarca la Colección, la Óptica, la Biblioteca y el Grupo de Creación Literaria Oqli).
CID Topilejo: Preservación y difusión cultural comunitaria
Colectivo Páak’al
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San Miguel Topilejo es uno de los pueblos originarios de Tlalpan, en el sur de la CDMX. Esta comunidad cuenta con una rica historia que se remonta al menos al siglo XVII, y alberga en su seno a una población heterogénea y bioculturalmente diversa. A través de una triple colaboración entre la ciudadanía de Topilejo (Mujeres en Lucha S.P.R., entre otros), especialistas (UAM, UNAM, Colectivo Páak’al) y administración pública (Gobernanza Participativa Topilejo, Subdelegación de Topilejo, Secretaría de Cultura de la CDMX) constituimos un Centro de Información y Documentación desde y para la comunidad. Los principios rectores del proyecto son la transdisciplinariedad, la equidad, la comunidad, la diversidad y la perspectiva biocultural. Hemos procurado que estos principios sean transversales en el diseño, ejecución y evaluación del CID en todas sus etapas. Por un lado, se hacen diagnósticos participativos para identificar los intereses prioritarios y se desarrollan propuestas ad hoc. También se brinda capacitación gratuita a personas y grupos con interés en la investigación, preservación y difusión de la cultura. Y hacemos evaluaciones comunitarias, reuniendo las impresiones y saberes diversos. Las metodologías participativas son un camino para devolver el derecho a hacer y vivir cultura, acercándola a los grupos históricamente marginados.
En el Colectivo Páak’al creamos espacios de acción-reflexión intercultural, es decir, donde sea posible pensar y actuar para crear convivencia que trascienda la co-existencia entre grupos y personas de diferentes orígenes, en condiciones de diálogo y paridad. Las personas que lo integramos procedemos de diferentes formaciones, por eso creemos en el diseño y ejecución transdisciplinar de proyectos. Contamos con personas dedicadas a la historia, la historia del arte, la filosofía de la historia, sociología, química, arquitectura y diseño de la comunicación gráfica. Tenemos nuestra sede en la CDMX, lugar heterogéneo y diverso, especialmente necesitado de intercultoras e intercultores. En 2018 nos aliamos con las Mujeres en Lucha de San Miguel Topilejo para revitalizar el área cultural de su Centro de Servicios Comunitarios. El año posterior resultamos beneficiarios por el Programa de Colectivos Culturales Comunitarios CDMX 2019, de la Secretaría de Cultura, para construir un Centro de Información y Documentación para este pueblo originario.
El Museo de Barrio de Tecoxpa a 10 años de su creación ¿Dónde están sus creadores?
Héctor Pulido Vega
En 2007 se creó la Secretaría de Educación del Distrito Federal, cuya primera meta fue desarrollar la transformación del modelo educativo, para lo cual integró el Proyecto de la Ciudad Educadora y del Conocimiento. Y entre las acciones a desarrollar se encontró el Museo Internacional de la Educación y conocimiento de la Ciudad de México. Se estableció generar un componente de interacción entre el museo y las comunidades, barrios y pueblos de la ciudad. Se creó el Programa Museos de Barrio, que dio como resultado dos museos: el de Mixcoac y el de Tecoxpa. La idea fue generar museos vivos, educativos y culturales, y no desarrollar el formato clásico del museo. Aquí las propias comunidades fueron las constructoras directas y por ende las que determinaron sus contenidos; estos se basan en sus conocimientos, saberes, aprendizajes, costumbres y tradiciones que forman la parte esencial de su identidad y vida. El segundo museo, en Milpa Alta, se encontró con una comunidad ávida y receptora para poder crear su museo. Han pasado casi diez años y los actores comunitarios caminaron y transformaron los conceptos creados, el museo quedó no en el olvido, sino como un semillero para seguir impulsando procesos culturales en la comunidad.
Museógrafo, diseñador gráfico, sociólogo y gestor cultural. Ha desarrollado una diversidad de proyectos culturales de carácter comunitario, así como proyectos curatoriales, museográficos, museológicos y de investigación; de igual manera ha diseñado, creado y puesto en marcha programas para diversas instancias e instituciones culturales, educativas y de salud. Actualmente concluye el Posgrado de Políticas Culturales Comunitarias en FLACSO Argentina en el Programa de Ibercultura Viva. Entre sus trabajos ha podido colaborar con personalidades como Iker Larrauri, padre de la museología en México, Axel Didriksson, primer Secretario de Educación de la Ciudad de México y Saúl Vicente Vázquez, ex Asesor del Foro Permanente de Naciones Unidas para las cuestiones indígenas. En el ámbito curatorial y museográfico ha montado más de setenta exposiciones con diversos artistas, entre ellos Geles Cabrera, León Chávez Texeiro, Rolando de la Rosa y Fulgencio Lazo, entre otros, así como para diversos colectivos culturales e instituciones educativas. Actualmente colabora con diversos colectivos comunitarios en varios proyectos como el Museo Vestigios de la Vida con la Galería Nopal A.C. en Milpa Alta, Nuestros Sábados en el Parque Morelos en la alcaldía Cuauhtémoc y Di madi ma hai A.C. en el estado de Hidalgo.
Agenda Cultural hacia una Participación Cultural Incluyente
Nancy Amado Soto
Esta propuesta colectiva tiene como finalidad plasmar el trabajo de análisis y reflexión que se generó a través de la participación de diversos actores culturales durante marzo y abril de 2018, y que se entregó el 5 de junio de 2018 a Néstor Núñez López, candidato a la alcaldía Cuauhtémoc, en el Foro de Cultura en el que se nos convocó a diversos actores culturales. Se partió de conversatorios en los que se puntualizaron necesidades, intereses y problemáticas identificadas desde las experiencias de los diversos actores culturales, mismos que son la base para la construcción de la Agenda Cultural hacia una participación cultural incluyente, ya que al ser los mediadores entre la ciudadanía y gobierno son la clave para dimensionar las estrategias a desarrollar. Se realizó un análisis de los involucrados para identificar la percepción de otros grupos y organizaciones sobre cómo se entienden los derechos culturales partiendo de los principios de universalidad, indivisibilidad, inherencia, interdependencia y progresividad. Es importante mencionar que las reflexiones también giraron en torno a algunos de los tratados internacionales y locales, teniendo presente en todo momento que los derechos culturales son derechos relacionados con el arte y la cultura, entendidos en una amplia dimensión. Son derechos promovidos para garantizar que las personas y las comunidades tengan acceso a la cultura y puedan participar en aquella que sea de su elección. Son fundamentalmente derechos humanos para asegurar el disfrute de la cultura y de sus componentes en condiciones de igualdad, dignidad humana y no discriminación. La propuesta se divide en principios bajo los cuales se rige la agenda, algunos de los compromisos que se pretenden establecer entre la alcaldía, la ciudadanía y actores culturales, con los que se daría cumplimiento a las obligaciones de respetar, proteger, promover y garantizar los derechos culturales. Las recomendaciones, aunque no son de competencia directa de la alcaldía, pueden ser puente para establecer con otras instituciones, convenios, propuestas y/o acuerdos con los que se generen las condiciones para garantizar el acceso equitativo a una vida cultural, así como al libre ejercicio de las prácticas artísticas, culturales y de la gestión del patrimonio cultural material e inmaterial.
He participado durante 19 años tanto de manera voluntaria como de forma remunerada, desempeñando actividades de planeación, ejecución, seguimiento y evaluación de proyectos sociales y culturales con enfoque de DDHH y Género, coordinación de equipos de trabajo y voluntariado, acompañamiento socioeducativo y facilitación de procesos de aprendizaje presenciales y en línea en derechos humanos, género, educación popular y paz, en desarrollo institucional, promoción y defensa de los derechos humanos. Soy fundadora y coordinadora general de Trascendiendo con Resiliencia y Dignidad, A.C., en 2009 obtuve el premio UVM por el Desarrollo Social, que entrega la IYF, Sylvan/Laureate Foundation y la Universidad del Valle de México.
19:30 – 20:00 h